Denuncian el "maltrato" de Inmigración contra haitianos en la frontera
Grupos de derechos humanos y proinmigrantes marcharon este jueves en El Paso (Texas) en solidaridad con los haitianos y denunciaron que la "agresión" contra estos inmigrantes es el reflejo del "racismo" y los "abusos" históricos de las autoridades migratorias de EE.UU. en la frontera con México.
Con banderas de Estados Unidos y gritos de "Biden escucha, estamos en la lucha", decenas de personas marcharon hacia el puente Santa Fe, cerca de la frontera con México, donde líderes comunitarios, religiosos y políticos se mostraron indignados por la expulsión de haitianos recién llegados.
En una rueda de prensa al cabo de la llamada "Marcha por nuestra dignidad", los activistas denunciaron la constante "xenofobia", el "racismo" y "la brutalidad policíaca" de oficiales del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés).
La "agresión" en Del Río (Texas) contra los haitianos "es evidencia de lo que ya sabíamos", que el actuar de las autoridades migratorias se fundamenta en "la supremacía blanca y el racismo", denunció Fernando García, líder de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos (BNHR, en inglés).
Agregó que la autoridades migratorias "están fuera de control y motivadas políticamente" y urgió al presidente Joe Biden y al Congreso "parar la agresión y cambiar el curso, si no quieren ser cómplices".
Rechazó igualmente las "imágenes de oficiales de la Patrulla Fronteriza a caballo persiguiendo y azotando a haitianos de raza negra".
Para García es "inaceptable y vergonzoso" el maltrato a miles de inmigrantes que han llegado en las últimas semanas a Del Río, en su mayoría haitianos.
Por su parte, el pastor Michael E. Grady instó a "proteger" a los haitianos al recordar que en pocos meses esta comunidad ha enfrentado el asesinato de su presidente y la destrucción y muerte debido al terremoto y una tormenta tropical.
Lamentó que en Estados Unidos "han sido maltratados por buscar un lugar mejor donde vivir".
RECHAZAN EXPULSIÓN AUTOMÁTICA
Los activistas además criticaron la continua militarización de la frontera, pidieron un alivio migratorio humanitario para los haitianos y eliminar el título 42, que permite la deportación automáticamente en la frontera sin permitir a los inmigrantes presentar una solicitud de asilo.
"Tenemos que terminar el título 42 y tenemos que terminar el querer eliminar el asilo", manifestó por su parte Rubén García, de la organización Annunciation House.
Entre tanto, la congresista Verónica Escobar, señaló en un mensaje leído durante una rueda de prensa que el "abuso y maltrato" al que se ha sometido a los haitianos es "horrible e inaceptable" e hizo un llamado al presidente Biden a proveer el asilo al recordarle que "es legal".
Los activistas además urgieron al Gobierno Biden investigar a las autoridades migratorias, que esta semana han sido blanco de críticas por acosar montados en caballos a los inmigrantes haitianos en Del Río.
"Pedimos al Congreso que garantice que estos horrores en nuestra frontera nunca vuelvan a ocurrir mediante la promulgación de leyes sobre la responsabilidad de la Patrulla Fronteriza para detener los abusos ", señalaron los activistas.
"Es difícil ver videos de la Patrulla Fronteriza acorralando a gente porque son pobres, porque son diferentes, porque vienen de lejos", se lamentó Rubén García.
En este sentido, este jueves, el Gobierno estadounidense anunció la suspensión temporal del uso de caballos para patrullar la zona de la frontera con México por la que han cruzado, en las últimas semanas, miles de inmigrantes.
La polémica provocó este jueves la dimisión del enviado especial de Estados Unidos para Haití, Daniel Foote, quien renunció en protesta por el "trato inhumano" a los haitianos y el hecho de que se los deporte a un país con tantos problemas como Haití.
Según la Casa Blanca, desde el pasado 19 de septiembre se ha expulsado a Haití a "14.101 ciudadanos" de ese país en 12 vuelos, y otros 3.206 haitianos han salido del campamento en Del Río y están bajo custodia de las autoridades.