Exdirectivos de Volkswagen ante la justicia alemana por el "Dieselgate"
Están acusados de fraude en banda organizada y fraude fiscal agravado
El juicio contra cuatro antiguos directivos de Volkswagen acusados por el escándalo conocido como "Dieselgate" se inició este jueves en Alemania, sin la presencia del expresidente de la firma, epílogo penal de un caso que devastó la imagen del constructor alemán.
Todos ellos están acusados de fraude en banda organizada y fraude fiscal agravado en relación al escándalo que estalló en septiembre de 2015, cuando el fabricante alemán reconoció haber manipulado 11 millones de vehículos para falsear sus emisiones de gases contaminantes.
La semana pasada, la justicia decidió aplazar -sin plazo definido- el procedimiento contra Martin Winterkorn, presidente de la compañía entre 2007 y 2015, de 74 años, que acaba de pasar por una intervención quirúrgica.
El juicio, abierto ante el tribunal de Brunswick (norte), no demasiado lejos de la sede histórica del constructor, es el segundo procedimiento criminal de importancia vinculado con el escándalo del Dieselgate.
Hace un año se inició otro proceso --que sigue en curso-- contra Rupert Stadler, antiguo presidente de Audi y filial del grupo Volkswagen.
700 páginas acusatorias
En este gigantesco juicio con cerca de 700 páginas de acta de acusación, los jueces deberán descubrir quiénes entre los ingenieros y los directores del grupo estaban al corriente del fraude, en qué momento lo supieron, quién ideó la artimaña o quién la toleró para vender más vehículos.
Ante el tribunal comparecen Heinz-Jakob Neußer, exresponsable de desarrollo de motores del grupo y luego director técnico de la marca VW.
Los otros tres ingenieros, Jens H., Hanno J. y Thorsten D., ocuparon varios puestos de responsabilidad en las unidades de desarrollo técnico, desde la electrónica a los sistemas de tratamiento de emisiones.
"La acusación de fraude concierne a unos 9 millones de vehículos vendidos en Europa y Estados Unidos", con un daño para los clientes de "varios centenares de millones de euros" según la acusación.
El grupo Volkswagen pagó caro este escándalo, pero quiere dejarlo atrás, ya que devastó la reputación de constructor y de todo el sector automotor, rama fundamental de la industria alemana.
El escándalo "forma parte de nuestra historia" y "hemos aprendido de nuestro pasado" indicó este jueves un portavoz del grupo.
Electricidad y nuevos tiempos
Bajo la dirección de su actual presidente ejecutivo, Herbert Diess, el grupo que congrega a una docena de marcas se centra de forma resuelta hacia el coche eléctrico, para renovar su imagen y bajo la presión de las reglas europeas.
Pero lo pagado tras el escándalo por el grupo supera los 30.000 millones de euros (unos 35.500 millones de dólares) desembolsados en multas, indemnizaciones y gastos judiciales, la mayor parte en Estados Unidos, donde Volkswagen se declaró culpable de fraude y obstrucción a la justicia.
En Estados Unidos, un exingeniero y un exdirigente fueron condenados a penas de cárcel. En Alemania, el grupo pagó en 2018 una multa de 1.000 millones de euros (USD 1.180 millones)
En el ámbito civil, los inversores reclaman 9.000 millones de euros de indemnización, acusando al grupo de no haber cumplido con su obligación de transparencia hacia los mercados
En fin, el expresidente del grupo Winterkorn deberá pagar también 11,2 millones de euros (13,25 millones de dólares) a su antigua empresa por daños e intereses, en el marco de un acuerdo amistoso entre el grupo y varios exdirigentes.
Su juicio es el más esperado pero el tribunal indicó que era imposible precisar en qué momento podrá comparecer el acusado.
El expresidente también está acusado en Berlín por falso testimonio ante una comisión parlamentaria que investigaba este escándalo tan perjudicial para la reputación del sector automóvil alemán.