El G20 no convence a China de limitar el calentamiento global a 1,5 grados
Los ministros de Energía y Medio Ambiente del G20 fracasaron hoy en Nápoles (sur de Italia) en su intento de convencer a China e India de intentar limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados en este siglo, aunque sí acordaron acelerar la transición ecológica y fomentar las inversiones "verdes".
"Dos de los 60 artículos previstos se sacaron de la declaración final porque no se pudo llegar a un acuerdo", dijo en rueda de prensa el ministro italiano de Transición Ecológica, Roberto Cingolani, que tuvo que retrasar su comparecencia por las discrepancias entre los países.
La reunión de este viernes, bajo la presidencia de turno de Italia, estaba considerada como una cita clave en materia de cambio climático antes de que se celebre la COP26 (Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático), en noviembre en la ciudad escocesa de Glasgow (Reino Unido), y resultó "compleja".
Los dos puntos de discordia que no han contado con el apoyo de China e India han sido mantener el calentamiento global en 1,5 grados centígrados, la menor cifra posible contemplada en los Acuerdos de París sobre cambio climático, y la eliminación de los subsidios a los combustibles fósiles y el cierre de las centrales del carbono en 2025.
La presidencia italiana también había apostado porque el G20 se sumara a la intención de la Unión Europea (UE) de lograr una disminución del 55 % de las emisiones contaminantes para 2030 con respecto a los niveles de 1990.
No ha habido acuerdo. Sobre el aspecto de rebajar las emisiones al 55 %, Cingolani ya había lamentado antes de la celebración de este G20 que había dificultades, pues numerosos países mantienen objetivos más bajos.
Sin embargo, la intención de mantener el calentamiento global en los 1,5 grados y el asunto de la descarbonización han provocado la férrea oposición de China e India.
"Ha habido una negociación larga con China, India, Rusia... Hemos tenido que suspender las reuniones en varias ocasiones y hablar con cada uno de ellos", subrayó, y destacó la intermediación crucial del enviado especial de Estados Unidos para el Clima, John Kerry.
"Ninguno ha puesto en duda el Acuerdo de París", apuntó, las diferencias han estado en los grados, porque "algunos países no creen que puedan" comprometerse a reducir las emisiones para mantener la temperatura en los 1,5 grados, ya que tienen unos modelos económicos "fuertemente basados en el carbón".
Sí se encontraron puntos en común en otras áreas como fomentar las finanzas "verdes", avanzar en una recuperación económica más inclusiva y sostenible o apostar cada vez más por las energías renovables.
Cingolani avisó de que la presidencia italiana elaborará un informe detallado sobre lo ocurrido, con los nombres de los países que han puesto más impedimentos y los motivos, y lo publicará próximamente.
La reunión del G20 de Energía concluye así, después de que el jueves la sesión dedicada a la biodiversidad y el medio ambiente acabara con un comunicado sin empeños concretos, y en el que entre otras cosas se hacía un llamamiento a la gestión sostenible del agua, la protección de la biodiversidad y la implementación de acciones para lograr la descarbonización.
"La presidencia italiana está trabajando para elevar el listón de la ambición a nivel mundial. Es fundamental encontrar un camino común: la única forma de afrontar los cambios climáticos", destacó el Ministerio de Transición Ecológica de Italia en las redes sociales antes de que concluyera la reunión.
A este G20 de Medio Ambiente y Energía de dos días han asistido el ministro argentino de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Martha Delgado, y la vicepresidenta tercera del Gobierno de España y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
También la ministra francesa para la Transición Ecológica, Barbara Pompili, y el secretario de Estado del Ministerio Federal de Medio Ambiente de Alemania, Jochen Flasbarth, entre otros.
El Ministerio español de Transición Ecológica y Reto Demográfico dijo en un mensaje en Twitter que Ribera y Kerry se habían reunido en Nápoles y habían compartido la necesidad de que la UE y Estados Unidos "trabajen conjuntamente para alcanzar el mayor éxito posible en la próxima COP26 de Glasgow".
La ministra francesa también se expresó en la misma línea y subrayó que "Francia y Estados Unidos están comprometidos a convencer a la mayor cantidad posible de países del G20 para que aumenten sus ambiciones climáticas".