Rescatan un manatí varado en una playa de la costa este de Puerto Rico
Un manatí de 3 metros fue rescatado después de quedar varado en una playa de Humacao, municipio de la costa este de Puerto Rico, desde donde fue transportado al Centro de Conservación de Manatíes en Bayamón para estabilizarlo.
El Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) informó en un comunicado que una llamada al Sistema de Llamadas de Emergencias 9-1-1 alertó este domingo al personal de la agencia de la presencia de un manatí hembra en Punta Santiago, en Humacao.
La bióloga Nilda Jiménez, coordinadora del Programa de Especies Protegidas del DRNA, explicó que el manatí hembra fue transportado al Centro de Conservación de Manatíes, en Bayamón, para conocer su estado de salud y estabilizarla.
"Desconocemos al momento qué pudo haber ocasionado su 'varamiento'. Sí sabemos que está delgada y que pudiese presentar algún golpe en la cabeza. Tanto los biólogos del DRNA, del Centro de Conservación de Manatíes y personal de Manejo de Emergencia de Humacao colaboraron en el rescate del mamífero", sostuvo la funcionaria.
Por otro lado, la bióloga Grisel Rodríguez, del Programa de Rescate de Mamíferos Marinos del DRNA, solicitó a los ciudadanos colaboración para la protección de la especie, cuya población en Puerto Rico se estima en 300 individuos, según el último censo.
"Gracias a esa llamada rápida de la ciudadana y a la respuesta de los expertos, pudimos rescatar a este manatí. Es importante que conozcamos qué hacer si presenciamos que algún mamífero marino está en peligro. El Sistema de Llamadas de Emergecias 9-1-1 atiende este tipo de incidentes las 24 horas y los 7 días. También las personas pueden descargar la aplicación Dolphin & Wales 911 para reportar emergencias con manatíes, tortugas marinas o ballenas", dijo.
En lo que va de año, nueve manatíes han muerto en las costas de la isla, la mayoría por el impacto de embarcaciones de motor.
Las biólogas solicitaron a los patrones de embarcación repasar la Ley de Navegación y operar las embarcaciones con precaución y a una velocidad reducida en desembocaduras de ríos y áreas con yerbas marinas, donde los manatíes suelen ir a alimentarse.