Hallados seis supervivientes del deslizamiento de tierra en Japón
Los servicios de rescate han encontrado con vida a seis supervivientes del enorme deslizamiento de tierra ocurrido este sábado en la ciudad japonesa de Atami, a las afueras de Tokio, según informa la cadena nipona TBS.
Los rescatados no corren peligro de muerte, según las fuentes de la cadena. Hasta esta noticia, se tenía constancia de al menos una veintena de desaparecidos por el deslave, que ha arrasado con diez casas este sábado en el distrito de Izusan.
"Las fuertes lluvias han provocado que el terreno cediera y se produjera el deslave (...). Tomó velocidad y se llevó varias casas enteras con la gente dentro", ha indicado el gobernador de Shizuoka, Heita Kawakatsu, según recoge el periódico 'Japan Times'.
Por el momento, los cuerpos de Policía y Bomberos se encuentran trabajando en la zona y están llevando a cabo labores de rescate y búsqueda de los desaparecidos con la colaboración de una treintena de militares, mientras que unos 200 hogares han quedado sin suministro eléctrico. Los bomberos han informado de unas diez llamadas de personas atrapadas en sus casas.
De acuerdo con el Departamento de Bomberos, en torno a las 10.30 horas (hora local) han recibido la llamada de alerta del suceso, y según ha informado la prefectura de Shizuoka, se ha producido un flujo de escombros que ha arrasado con varias casas.
El primer ministro japonés, Yoshihide Suga, ha conversado ya con el ministro de Desastres, Yasufumi Tanahashi, y se ha convocado una comisión dentro de la oficina del primer ministro para recavar toda la información pertinente.
"Puede haber fuertes lluvias debido al frente tormentoso, así que tendremos que estar en alerta, al máximo nivel", ha apuntado Suga durante la reunión del comité de emergencia.
Mientras, también se han detectado crecidas en los ríos de las prefecturas de Hiratsuka y Kanagawa, donde se han emitido algunas órdenes de evacuación. También se ha ordenado la evacuación en ciudades como Yokohama, Chiba y Shizuoka.
La lluvia afecta además a los transportes, con suspensiones de trayectos de tren, incluido el tren bala, y la Agencia Meteorológica de Japón ha pedido máxima precaución.