Crecen las voces que exigen la renuncia de Cuomo
La posición del gobernador de Nueva York Andrew Cuomo parecía cada vez más amenazada el jueves luego de que la mayoría de los legisladores estatales pidieron su renuncia y la policía del Capitolio estatal dijo estar lista para investigar una acusación de manoseo.
El periódico The Times Union de Albany reportó el miércoles que una asesora no identificada había afirmado que Cuomo le metió la mano debajo de su blusa y la manoseó tras convocarla a su residencia oficial a fines del año pasado. El gobernador dijo que nunca ha tocado a nadie indebidamente.
Una abogada de Cuomo dijo el jueves que ella reportó la acusación a la policía después de que la mujer involucrada se negara a hacerlo ella misma.
Beth Garvey, abogada interina del gobernador, dijo en un comunicado que, por una cuestión de política estatal, a la mujer que hizo las acusaciones se le dijo que debería ponerse en contacto con su departamento de policía local.
“En este caso la persona es representada por un abogado, y cuando el abogado confirmó que su cliente no quería presentar un informe, el estado notificó al departamento de policía y les dio la información del abogado”, dijo Garvey.
Agregó que el estado estaba obligado a hacerlo, de acuerdo con la ley estatal.
Steve Smith, vocero del Departamento de Policía de Albany, no respondió de momento a un mensaje de The Associated Press para solicitarle sus comentarios, pero le dijo al periódico The New York Times que la policía se puso en contacto con un representante de la mujer y le ofrecieron sus servicios.
Mientras tanto, más legisladores pidieron la renuncia del gobernador por su presunta conducta inadecuada hacia las mujeres.
Al menos 121 miembros del Senado y la Asamblea estatales han dicho públicamente que creen que Cuomo ya no puede gobernar y debería renunciar ahora, de acuerdo con un conteo de The Associated Press, el cual incluye a 65 demócratas y 56 republicanos.
El respaldo a Cuomo en el Senado estatal es particularmente débil. Aproximadamente dos terceras partes de sus miembros han pedido la renuncia del demócrata, entre ellos Andrea Stewart-Cousins, líder de la mayoría.
El principal demócrata en la Asamblea estatal, el presidente Carl Heastie, dijo que se reunía con miembros el jueves para examinar “posibles caminos para seguir adelante” ante las crecientes acusaciones.
En Nueva York, la Asamblea es la cámara legislativa que pudiera ordenar el juicio político a Cuomo, que enfrenta múltiples acusaciones de que hizo del lugar de trabajo un sitio incómodo para mujeres jóvenes al hacer insinuaciones sexualmente sugestivas y presentar comportamiento en ese tenor, incluyendo manoseos y besos indeseados.
Un grupo de 59 legisladores demócratas, incluyendo 19 senadores y 40 asambleístas, exigieron el jueves en una carta la renuncia de Cuomo a raíz de la nueva acusación.
“A la luz de la admisión por parte del gobernador de que tuvo conducta inapropiada, y del hallazgo de datos alterados sobre muertes por COVID-19 en hogares de ancianos, él ha perdido la confianza del público y de la legislatura estatal, lo que le hace ineficaz en este tiempo de gran necesidad”, se afirma en la misiva. “Es hora de que el gobernador Cuomo renuncie”.
El gobernador ha dicho repetidas veces que no renunciará, y exhortó al público a que aguarde el desenlace de una investigación sobre su conducta que está realizando la secretaria de Justicia estatal Letitia James. La oficina de Cuomo no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios el jueves.
Al menos cinco acusadoras — Charlotte Bennett, Lindsey Boylan, Ana Liss, Karen Hinton y la última — trabajaron para el gobernador en Albany o durante el tiempo en que estuvo en el gabinete del presidente Bill Clinton. Otra, Anna Rouch, le dijo al New York Times que conoció a Cuomo en la boda de una amiga.