Policías, narcos y funcionarios tras matanza de migrantes en el norte México
La matanza en el norte de México contra 19 personas, la mayoría supuestamente migrantes, ha estremecido al país y ha puesto sobre la mesa una presunta colusión entre policías, agentes migratorios y redes de trata de personas en la frontera con Estados Unidos.
Estas son las preguntas clave para entender el avance de las investigaciones:
- ¿Qué ocurrió en Camargo?
La Fiscalía General del estado de Tamaulipas informó el 23 de enero del hallazgo de dos camionetas calcinadas, una de ellas con 19 cadáveres en el interior, en el poblado de Santa Anita, en el municipio de Camargo, fronterizo con Texas (Estados Unidos) y el estado mexicano de Nuevo León.
El Ministerio Público estatal abrió una investigación, según la cual las víctimas fueron asesinadas con armas de fuego y posteriormente calcinadas.
Desde un primer momento se sospechó que los muertos eran migrantes que intentaban llegar a Estados Unidos a través de México y la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) comparó los hechos con la masacre de San Fernando del 2010, en la que fueron asesinados 72 migrantes en la misma región.
- ¿De dónde son las víctimas?
La Cancillería de Guatemala confirmó el 27 de enero que analizaba al menos 15 muestras de ADN de posibles familiares de los supuestos migrantes, puesto que se sospecha que la mayoría eran de las comunidades de Comitancillos y San Marcos.
El portavoz de seguridad del Gobierno de Tamaulipas, Luis Alberto Rodríguez, dijo este miércoles a Efe que de los 19 cuerpos han sido "identificados con plenitud" dos guatemaltecos y dos mexicanos.
Detalló que uno de los mexicanos estaba vinculado con una red de tráfico de migrantes mientras que el otro fue quien reclamó en días pasados una de las dos camionetas que aparecieron en el escenario del crimen, que estaba resguardada por el Instituto Nacional de Migración (INM), que la había interceptado el 6 de diciembre en Escobedo (Nuevo León) con otros 66 migrantes en su interior.
- ¿Quiénes son los responsables?
El fiscal general de Tamaulipas, Irving Barrios, anunció el martes que 12 agentes de la policía estatal fueron capturados por su probable participación en el crimen y acusados de homicidio calificado, abuso de autoridad, mal desempeño de funciones administrativas y falsedad de informes.
Barrios no detalló si los policías perpetraron el asesinato o encubrieron a los asesinos, y explicó que el día de los hechos pasaron por la zona otras camionetas con migrantes salvadoreños y guatemaltecos en dirección a Estados Unidos.
"No se encontraron casquillos en el lugar donde estaban incinerados, pudo haber una alteración de la escena del crimen", comentó a Efe el portavoz de Seguridad, quien añadió que hubo "contradicciones" en las versiones de los policías.
- ¿Participaron agentes migratorios?
En el punto de mira también está el Instituto Nacional de Migración (INM) tras saberse que hace unas semanas tenía en su poder una de las dos camionetas de la escena del crimen.
La secretaria de Gobernación de México, Olga Sánchez Cordero, ministerio responsable del INM, afirmó este miércoles que "decenas de funcionarios" migratorios han sido cesados y denunciados ante la Fiscalía por estos hechos.
"Hemos tenido problemas con muchos de los funcionarios de migración, precisamente en este tipo de violaciones de derechos y lo tenemos que reconocer para avanzar”, expresó Sánchez Cordero rompiendo el discurso oficial del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien suele sostener que en el país no hay violaciones a los derechos humanos de los migrantes.
- ¿Qué papel juega el narcotráfico en la zona?
Además de la investigación de policías estatales por parte de la Fiscalía y de agentes migratorios por parte del Gobierno federal, las autoridades mantienen la línea de investigación que apunta al crimen organizado y el tráfico de migrantes detrás de todo este entramado.
Según testimonios recabados por Efe, el día de los hechos por la tarde, sicarios del Cartel del Noreste, los antiguos Zetas, se habrían enfrentado con el Cartel del Golfo, organización criminal que controla Tamaulipas, en el lugar de la matanza.
Ambos carteles mantienen una disputa por el control de los estados del noreste de México desde marzo del 2010, conflicto que ha provocado desde esa fecha más de 15.000 desaparecidos y miles de muertes.