Aseguradoras británicas compensarán a negocios afectados por restricciones
Muchas compañías se negaron a pagar compensaciones porque entendían que solo las pólizas más concretas ofrecían cobertura.
Las aseguradoras británicas deberán pagar compensaciones económicas a las pequeñas empresas afectadas por las restricciones impuestas durante la primera ola de la pandemia de coronavirus, según dictaminó este viernes el Tribunal Supremo del Reino Unido.
La decisión adoptada por la más alta instancia judicial de este país establece un precedente legal y abre la puerta a que miles de negocios afectados reclamen compensaciones a sus compañías aseguradoras, lo que podría costar al sector más de 1.800 millones de libras esterlinas (unos 2.000 millones de euros).
El primer confinamiento decretado en el Reino Unido el pasado marzo obligó a miles de pequeñas empresas a presentar reclamaciones a sus aseguradoras, de acuerdo con las cláusulas de interrupción del negocio incluidas en sus pólizas.
Muchas compañías se negaron a pagar compensaciones porque entendían que solo las pólizas más concretas ofrecían cobertura para hacer frente a una situación sin precedentes.
En consecuencia, la Autoridad de Conducta Financiera británica (FCA, en inglés) llevó el caso ante el Tribunal Superior, a fin de aportar claridad respecto a la redacción de las pólizas con cláusulas de interrupción de actividad empresarial.
Ese tribunal, tras examinar la fraseología de las pólizas de varias aseguradoras, fijó unos parámetros para determinar qué casos estarían cubiertos en el futuro en una situación similar a la crisis sanitaria provocada por la covid-19.
Sus conclusiones no dejaron del todo contentas a las partes y aseguradoras, por una parte, y la FCA y grupos de afectados, por otra, presentaron un recurso ante el Tribunal Superior, que hoy ha fallado finalmente a favor de los clientes.
Uno de sus jueces, Michael Briggs, indicó en la sentencia que "la cobertura aparentemente ofrecida para una interrupción del negocio" causada por "los efectos de una pandemia nacional de enfermedad notificable" era, "en realidad, ilusoria", justo "cuando se suponía que era más necesaria para los asegurados".
"Eso parece que, claramente, era contrario al espíritu e intención de las disposiciones pertinentes incluidas en las pólizas contratadas", señaló el magistrado.
El director de consumo y competitividad de la FCA, Sheldon Mills, celebró el resultado y recordó que el coronavirus ha causado "pérdidas cuantiosas y angustia" a miles de pequeñas empresas que afrontan "enormes presiones financieras para mantenerse a flote".
"Nuestro objetivo en este proceso judicial ha sido el de aportar claridad a todas las partes posibles, tan pronto como sea posible, y esta sentencia elimina de manera decisiva muchos obstáculos para las reclamaciones de los asegurados", agregó Mills.
La Asociación Británica de Aseguradoras (ABI) aseguró hoy que el sector se verá obligado a "pagar más de 1.800 millones de libras esterlinas en reclamaciones relacionadas con la covid-19", entre las que se incluyen las "pólizas de interrupción de negocio".
"Las aseguradoras han apoyado este proceso legal en todo momento y celebramos la claridad que aporta la sentencia a una serie de asuntos complejos", afirmó el director general de la ABI, Huw Evans.
El ministro británico de Empresa, Energía y Estrategia Industrial, Kwasi Kwarteng, también consideró hoy que la decisión judicial "es un salvavidas" para "decenas de miles de peluquerías, bares, restaurantes y otros pequeños negocios" que cumplieron con las restricciones impuestas y "cerraron su puertas para proteger la salud del país".