Rebeldes yemenitas catalogados "terroristas" por EEUU se ensañan con la administración Trump
Tres jefes hutíes estarán incluidos en la lista negra, destacando su líder, Abdel Malek al Huthi
Designados como "grupo terrorista" por Estados Unidos, los rebeldes hutíes chiitas yemeníes cargaron este lunes contra la administración saliente de Donald Trump, cuya decisión provoca temores entre las organizaciones internacionales de un agravamiento de la crisis humanitaria en este país en guerra.
Los hutíes están apoyados políticamente por Irán, enemigo acérrimo de Estados Unidos y gran rival regional de Arabia Saudita. Este reino, aliado de Washington, lidera una coalición militar que sostiene al gobierno yemenita contra los hutíes.
El domingo, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, diez días antes de la finalización de su administración, anunció que los hutíes integrarán su lista de grupos "terroristas". Tres jefes hutíes estarán incluidos en la lista negra, destacando su líder, Abdel Malek al Huthi.
"Condenamos este acto y nos reservamos nuestro derecho a responder", tuiteó un alto jefe hutí, Mohamed Ali al Huthi. "La política y las acciones de la administración Trump son terrorismo (...) a nuestro pueblo no le importa ninguna calificación por parte de la administración Trump mientras sea cómplice del asesinato de yemenitas".
Por su parte, el gobierno yemení, desplazado, se congratuló en un comunicado por la decisión estadounidense. "Los hutíes merecen ser calificados como una organización terrorista extranjera, no solamente por sus acciones terroristas, sino también por sus esfuerzos constantes para prolongar el conflicto".
El anuncio estadounidense se esperaba desde las elecciones presidenciales del 3 de noviembre. Oenegés e instituciones internacionales temían que Trump, derrotado en las urnas, buscara darle un gran golpe diplomático a Irán, antes de la llegada a la Casa Blanca de Joe Biden, quien aspira a dialogar con Teherán.
"Perdió credibilidad"
Irán condenó la decisión estadounidense, considerando su lista negra como "una herramienta que ha perdido credibilidad ...".
Las sanciones de Estados Unidos contra los hutíes entrarán en vigencia el 19 de enero, víspera de que Biden asuma su cargo.
Pompeo explicó en un comunicado que notificaría al Congreso esta decisión para reforzar "la disuasión contra las actividades nefastas del régimen iraní".
Estas sanciones procuran hacer a los hutíes "responsables de sus actos terroristas, en particular de los ataques transfronterizos que amenazan a las poblaciones civiles, las infraestructuras y el transporte marítimo", señaló en aparente alusión a disparos de misiles y drones insurgentes contra el reino saudita.
Desencadenado en 2014 por una ofensiva hutí que se apoderó de grandes zonas del territorio, en el norte particularmente, incluida la capital Saná, el conflicto yemenita ha provocado decenas de miles de muertes, según oenegés internacionales.
Aunque los combates han disminuido mucho durante meses y son esporádicos, las organizaciones están inquietas por la decisión estadounidense, que creen podría causar la paralización de la entrega de ayuda humanitaria a Yemen, así como los contactos con jefes hutíes, el pago al personal sanitario y la compra de alimentos y combustible
"Catástrofe"
Tras seis años de guerra, el 80% de la población de Yemen depende de la ayuda internacional y, según la ONU, se encamina hacia la peor crisis humanitaria en el mundo.
"El gobierno estadounidense debe asegurar que las sanciones no impidan abastecer de alimentos, combustible y medicamentos a un país que ya está en medio de un desastre humanitario", dijo Mohamed Abdi, director de una oenegé noruega para ayuda a Yemen.
"Estados Unidos reconoce las preocupaciones sobre el impacto de esta designación en la situación humanitaria", señaló Pompeo. "Planeamos desarrollar medidas para reducirlo".
Pero, Peter Salisbury, experto en Yemen del International Crisis Group, integrar a los hutíes en una lista negra podría "castigar a todos los yemeníes al precipitar una hambruna y causar poco daño a los rebeldes, que podrían acercarse más a Irán".