Conmemoración del fin de la Primera Guerra Mundial perturbado por el confinamiento
Las conmemoraciones por los soldados caídos en la Primera Guerra Mundial, que en el Reino Unido suelen celebrarse con gran pompa, se redujeron drásticamente este año debido a la pandemia de coronavirus, que dificultó la recaudación de fondos para los veteranos.
El "Remembrance Sunday" (Domingo del Recuerdo) está tradicionalmente marcado por los tributos a los soldados británicos y de la Commonwealth muertos en aquella contienda y en los conflictos posteriores.
Con conciertos, servicios religiosos y desfiles, se celebra en el Reino Unido el domingo más cercano al 11 de noviembre, fecha del armisticio firmado en 1918 entre Alemania y los Aliados.
Pero ante la segunda ola de la pandemia, que causó casi 48.000 muertos en el país desde principios de año, Inglaterra entró el jueves en un segundo confinamiento que durante cuatro semanas limitará la interacción social.
En el Cenotafio, monumento a los caídos en el centro de Londres, se mantiene la solemne ceremonia de ofrenda de flores, pero sin público ni desfile de veteranos.
Muchos servicios religiosos se cancelaron o se realizarán en línea.
Este año el tradicional concierto en el Royal Albert Hall fue pregrabado y la BBC lo transmitirá el sábado, con la participación del príncipe Carlos y el veterano de la Segunda Guerra Mundial Tom Moore, que se convirtió en héroe de los británicos durante el primer confinamiento por haber recaudado más de 33 millones de libras (43 millones de dólares, 36 millones de euros) para los servicios públicos de salud.
El gobierno pidió a los organizadores de eventos locales que "desaliente al público de asistir". El portavoz de Downing Street señaló que la fecha es "de importancia nacional", pero recordó que las reglas del confinamiento son "claras".
Para rendir homenaje a los soldados, la Legión Real Británica animó a los británicos a poner amapolas -un símbolo de recuerdo- en sus ventanas y a observar dos minutos de silencio el domingo.
Pero las restricciones debidas al virus impidieron a los voluntarios de este organismo recorrer las calles durante dos semanas como lo hacen cada año para vender amapolas de tela o papel y recaudar dinero con que ayudar a los veteranos.
Esto "podría resultar en pérdidas de millones de libras", advirtió su director Charles Byrne, llamando a la gente a donar en línea.