EE.UU.

Reporte: EEUU sabía que habría problemas al separar familias

EL DEPARTAMENTO DE SEGURIDAD NACIONAL NO INFORMÓ A FUNCIONARIOS DEL DEPARTAMENTO DE SALUD DEL PORQUÉ LOS ALBERGUES ESTABAN RECIBIENDO MÁS NIÑOS SEPARADOS DE SUS PADRES A FINALES DE 2017

Un niño centroamericano solicitante de asilo corre por un pasillo después de llegar de un centro de detención migratoria a un albergue en San Diego. Foto: AP/Gregory Bull.

Nomaan Merchant/APHouston, Estados Unidos

Meses antes de que el gobierno de Donald Trump separara a miles de familias inmigrantes en la frontera con México, un “programa piloto” en Texas detectó problemas como falta de cunas para bebés arrebatados a sus padres, en un augurio de lo que estaba por venir, dice un reporte dado a conocer el jueves por congresistas demócratas.

Documentos en el reporte indican que el Departamento de Seguridad Nacional no informó a los funcionarios del Departamento de Salud del porqué los albergues estaban recibiendo más niños separados de sus padres a finales de 2017.

Ahora se ha revelado que Seguridad Nacional estaba operando el programa piloto en El Paso, Texas, que enjuiciaba a padres por cruzar la frontera ilegalmente y se llevaba a sus hijos a albergues del departamento.

“Anoche tuvimos una escasez de cunas para bebés”, escribió Jonathan White, un alto funcionario del Departamento de Salud, en un correo electrónico el 11 de noviembre de 2017.

Añadió: “En general, las llegadas de bebés están aumentando en las últimas semanas y pensamos que eso se debe a más separaciones de las madres por la CBP”, agregó el texto, en alusión a las siglas en inglés de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.

Los problemas revelados por el programa piloto presagiaron lo que sucedería meses más tarde: empleados del gobierno cuidando a bebés y niños pequeños en los llamados albergues para edades tempranas y muchos padres siendo deportados sin sus hijos.

Las consecuencias persisten: abogados que trabajan para reunir a las familias inmigrantes han dicho que no pueden contactar a los padres deportados de 545 niños que fueron separados desde julio de 2017.

Los demócratas en la Comisión de Asuntos Jurídicos de la cámara baja dieron a conocer el reporte junto con correos electrónicos de agencias gubernamentales. Eso se produce días antes de la elección presidencial, en momentos en que el partido hace campaña contra las separaciones de familias inmigrantes por Trump parte de su operación contra los cruces ilegales de la frontera y que desataron una ola de indignación.

El candidato presidencial demócrata Joe Biden anunció el jueves que si es elegido presidente formará una fuerza especial para reunir a las familias separadas.

El reporte resalta como el gobierno de Trump discutió desde el inicio las separaciones familiares como una táctica de implementación de las leyes.

En marzo de 2017, el entonces secretario de Seguridad Nacional John Kelly dijo a la CNN que el gobierno estaba ponderando quitarles niños a sus familias y colocarlos en albergues licenciados por el estado mientras los padres eran enjuiciados.

Ese julio, agentes de la CBP comenzaron a separar a familias en lo que más adelante fue llamado un programa piloto, de acuerdo con una revisión por el inspector general de Salud y Servicios Humanos.

Ese programa duró hasta el final de noviembre de 2017. De acuerdo con el inspector general, al menos 118 niños fueron separados de sus padres. Documentos en el nuevo reporte indican que la CBP no le explicó a Salud y servicios Humanos por qué los albergues estaban recibiendo más niños separados de sus padres.