Irán prohíbe las bodas y los funerales tras superar los 12.000 fallecidos por COVID-19
La cifra de fallecidos ha aumentado a 12,084, 153 más que el martes, cuando Irán registró el récord de 200 víctimas mortales en un solo día, informa la agencia de noticias Tasnim.
El presidente de Irán, Hasán Rohani, ha reconocido este miércoles la necesidad de tomar medidas para hacer frente a la pandemia de COVID-19 y, el mismo día en que el país ha superado el umbral de los 12,000 fallecidos, ha anunciado que las ceremonias de bodas y funerales estarán suspendidas hasta nuevo aviso.
La República Islámica es el décimo país más afectado de todo el mundo en número de casos y ha elevado este miércoles el recuento a 248,379, después de incluir casi 2,700 positivos (2,691) en 24 horas, según la portavoz del Ministerio de Sanidad, Sima Sadat Lari.
La cifra de fallecidos ha aumentado a 12,084, 153 más que el martes, cuando Irán registró el récord de 200 víctimas mortales en un solo día, informa la agencia de noticias Tasnim.
De los positivos registrados en las últimas 24 horas, 1,625 han tenido que ser ingresados. Las autoridades iraníes estiman que unos 3,300 pacientes permanecen internados en estado grave, en unidades de cuidados intensivos de hospitales de todo el país.
Rohani ha anunciado durante una reunión del Gobierno que ha dado orden al Ministerio de Sanidad de tomar medidas para prevenir contagios, principalmente en lugares donde pueda haber aglomeraciones y no esté garantizada la distancia de seguridad.
En aras de esta prevención, el Ejecutivo ha decretado la obligatoriedad de llevar mascarillas en todos los edificios de la administración y, por boca de Rohani, ha avisado de que las bodas y lo funerales quedarán suspendidos hasta nuevo aviso, según la agencia de noticias IRNA.
El portavoz del Gobierno, Alí Rabiei, ya advirtió el martes de que las autoridades podrían adoptar decisiones para incrementar las restricciones en Teherán ante el repunte de los contagios.