CORONAVIRUS

Ascienden a 1.770 los muertos por COVID-19 en China y a 70.548 los infectados

La Comisión Nacional de Sanidad de China informó hoy de que ya se han registrado en su país al menos 1.770 muertos por COVID-19, la neumonía causada por el coronavirus SARS-CoV-2, de la que se han diagnosticado hasta el momento 70.548 casos de contagio.

La fuente aseguró que, hasta la pasada medianoche local (16.00 GMT del domingo), se habían registrado 10.644 casos graves, mientras que 10.844 personas habían sanado.

Añadió que se ha realizado seguimiento médico a 546.016 pacientes en contacto cercano con los infectados, de los cuales 150.539 siguen en observación.

De estos últimos, 7.264 son casos sospechosos de haber contraído el virus.

Los datos de hoy suponen un incremento de 105 muertes respecto al día anterior, 100 de las cuales se certificaron en la provincia de Hubei, de la que Wuhan es capital y epicentro del brote, y que permanece en cuarentena desde el pasado 23 de enero.

Los cinco decesos restantes se distribuyeron entre las provincias de Henan (3) y Cantón (2), en el centro-este y el sureste del país, respectivamente.

La lista de nuevos positivos sumó otros 2.048 pacientes, de los cuales 1.933 se registraron en la provincia de Hubei.

Asimismo, en su informe de hoy, la Comisión agregó 1.425 nombres a la nómina de pacientes que habían superado con éxito la enfermedad y dados de alta.

Hasta la fecha, todos los fallecimientos menos cinco -en Taiwán, Japón, Francia, Filipinas y Hong Kong- se han producido en la China continental y, aunque una treintena de países cuentan con casos diagnosticados de neumonía de Wuhan, China acapara en torno al 99 % de los infectados.

Los síntomas del nuevo coronavirus son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden estar acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).

Partido de Evo Morales encabeza la intención de voto en Bolivia, según encuesta

El candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS), Luis Arce, delfín político del expresidente Evo Morales, encabeza la intención de voto con un 31,6% para las elecciones del 3 de mayo, según una encuesta divulgada este domingo.

Arce supera ampliamente al expresidente centrista Carlos Mesa (17,1%) y a la mandataria transitoria de derecha Jeanine Áñez (16,5%), según la encuestadora Ciesmori.

El sondeo, encargado por el diario El Deber y el canal de televisión Unitel, abarcó a 2.224 personas y fue realizado entre el 7 y el 14 febrero en las capitales de los nueve departamentos del país, con un margen de error del 2,07%.

Una encuesta en enero de Mercados y Muestras, para el diario Página Siete, daba un 26% al economista Luis Arce, considerado el padre de la estabilidad económica boliviana.

El líder civil conservador Luis Fernando Camacho acumuló un 9,4%, seguido del predicador evangélico de origen coreano Chi Hyun Chung (5,4%). La mayor sorpresa es el resultado del expresidente de derecha, Jorge "Tuto" Quiroga, que apenas logra el 1,6%.

El candidato de Morales encabeza la encuesta en cinco departamentos: La Paz (oeste), Cochabamba (centro), Potosí (suroeste), Oruro (sur) y Pando (norte), mientras que Áñez triunfa en Tarija (sur) y Beni (noreste), su tierra natal. Mesa únicamente se impone en Chuquisaca (sureste).

Camacho, que protagonizó las protestas sociales que derivaron en la renuncia de Morales en noviembre, logra un 28% en Santa Cruz (este), la región más desarrollada del país, seguido de Áñez, con un 26,3%. Arce suma apenas un 16% ahí.

De prevalecer estos resultados, Arce y Mesa disputarían un balotaje el 14 de junio.

La Constitución establece que si en primero acumula más del 40% de los sufragios válidos con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo es ungido directamente ganador en primera vuelta.

Las elecciones del 3 de mayo fueron convocadas de forma extraordinaria tras la anulación de los comicios del 10 de octubre, después de que una auditoría de la OEA denunciara irregularidades a favor del entonces presidente Morales, que se postuló a un cuarto mandato.

Morales, que gobernó casi 14 años, desde 2006, se vio obligado a renunciar tras el informe de la OEA y después de soportar tres semanas de presión en las calles y de perder el apoyo de los militares.