EE.UU.

El juicio de Trump se encamina a su absolución

El presidente Donald Trump habla durante un evento sobre trata de personas en la Sala Este de la Casa Blanca, el viernes 31 de enero de 2020, en Washington. (Foto AP / Evan Vucci)

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría ser absuelto este viernes por la noche en su juicio político si el Senado rechaza la posibilidad de convocar testigos, abriendo así el camino al veredicto del proceso.

Con toda probabilidad Trump, el tercer presidente de la historia del país que enfrenta un proceso de destitución, será declarado no culpable de los cargos de abuso de poder y obstrucción al Congreso que le imputó la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata.

La Constitución estadounidense exige una mayoría de dos tercios, 67 de los 100 senadores, para destituir un presidente, un apoyo inalcanzable para la oposición demócrata que tiene 47 escaños en la Cámara Alta del Congreso.

La única incógnita ahora es saber cuándo podrá Trump cerrar este episodio que divide a la clase política y a la ciudadanía.

El multimillonario, que lanzó su campaña para ser reelegido, tiene prisa por dejar atrás el juicio en su contra. Según sus allegados, espera ser absuelto antes de pronunciar su tradicional discurso sobre el estado de la Unión, el martes por la noche ante el Congreso.

Y tal vez espere incluso que el juicio termine antes del domingo, cuando tiene previsto dar una entrevista al canal de noticias conservador Fox News antes del Super Bowl, la final del campeonato de fútbol americano, un evento que suele reunir a unos 100 millones de telespectadores y durante el cual se emitirá un anuncio de la campaña presidencial.

A menos de 300 días de las elecciones presidenciales de noviembre, los demócratas intentan sacar nuevas informaciones comprometedoras para el mandatario republicano y reclaman la comparecencia de varios de sus allegados.

El viernes por la tarde presentarán una moción para obtener el derecho a convocar testigos. Si obtienen los 51 votos necesarios, lo que implica convencer a cuatro senadores republicanos de unirse a ellos, el juicio se prolongará bastante.

- Una votación clave sobre los testigos - La apuesta demócrata parece complicada. Cuatro senadores republicanos mostraron en los últimos días, a raíz de declaraciones del exasesor de Seguridad Nacional John Bolton, su interés por verlo testificar en la Cámara Alta.

Pero uno de ellos, Lamar Alexander, indicó el jueves por la noche que finalmente iba a votar contra la convocatoria de testigos. "No necesitamos pruebas adicionales" para demostrar los cargos, declaró en un comunicado.

"Fue inapropiado que el presidente pidiera a un líder extranjero investigar a su rival político y retener ayuda de Estados Unidos para llevarlo a investigar", añadió Alexander. "Pero la Constitución no da al Senado el poder de destituir al presidente y vetarlo simplemente por acciones que no son apropiadas".

La republicana moderada Susan Collins decidió, sin embargo, votar a favor de la convocatoria de testigos, y sus colegas Mitt Romney y Lisa Murkowski podrían hacer lo mismo.

Si la votación se saldara con un empate (50-50), los demócratas tienen previsto pedirle al hombre que preside el juicio, el jefe de la Corte Suprema, John Roberts, que vote a favor de su moción.

El magistrado, que suele ser puntilloso sobre la independencia de la justicia, podría negarse sin embargo a entrar en la lucha entre partidos, y la moción quedaría sin efecto.

Los 100 senadores podrían entonces pasar rápidamente a votar el veredicto, tal vez este mismo viernes por la noche o el sábado.

Una absolución sería "lo mejor para el país", dijo el jueves el abogado de la Casa Blanca, Pat Cipollone.

Los demócratas "intentan retirar el nombre del presidente de las papeletas de voto a unos meses de los comicios", lamentó.

- "Insignificante" - Para el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, un proceso sin testigos no tiene sentido.

"Si mis colegas republicanos se niegan a considerar testigos y documentos, entonces una absolución sería insignificante porque sería el resultado de una farsa de juicio", dijo este viernes a la prensa.

Aprovechando su mayoría en la Cámara de Representantes, los demócratas imputaron a Trump el 18 de diciembre, dando inicio a su proceso de destitución.

La investigación se llevó a cabo en un clima bronco y dio lugar a intercambios muy tensos entre los representantes demócratas y republicanos.

El marco del juicio en el Senado, mucho más estricto y formal, rebajó el tono de los debates sin impedir la emergencia de dos discursos contrapuestos.

Los demócratas acusan a Trump de abuso de poder y obstrucción al Congreso por pedir a Ucrania investigar a Joe Biden, su posible rival en las presidenciales de noviembre, e incluso de congelar una ayuda militar a Kiev para conseguirlo.

Y una vez destapado el escándalo tras una acusación anónima, el mandatario hizo todo lo posible por bloquear la investigación del Congreso, violando así la Constitución, alegó la acusación.