Negociadores del Brexit mantienen diálogos de última hora

Gran Bretaña y la Unión Europea dijeron ayer que las negociaciones del Brexit avanzan a paso lento mientras el gobierno británico trata de apuntar más allá con una amplia plataforma política presentada por la reina Isabel II en una ceremonia en el Parlamento.

En términos de importancia histórica, las minuciosas negociaciones en la sede de la UE en Bruselas pesan más que el discurso de la monarca sobre las prioridades de un gobierno conservador que pudiera durar apenas semanas o meses. Pero el espectáculo dio al menos una distracción del prolongado proceso de divorcio.

Gran Bretaña deberá salir del bloque europeo el 31 de octubre y una reunión de la UE el jueves o viernes es considerada una de las últimas oportunidades para aprobar un acuerdo de separación. El primer ministro Boris Johnson insiste en que el país va a salirse al final del mes, con o sin acuerdo.

Equipos técnicos de ambas partes trabajaron el fin de semana para asegurar un acuerdo de último minuto, pero reconocieron que persisten brechas significativas. El vocero de Johnson, James Slack, dijo que "las conversaciones siguen siendo constructivas, pero queda mucho por hacer".

Las discusiones se centraron en el espinoso asunto de futuros arreglos fronterizos entre Irlanda, miembro de la UE, e Irlanda del Norte, que es parte del Reino Unido. Gran Bretaña ha presentado una compleja propuesta para eliminar la necesidad de chequeos aduanales, pero la UE dice que se necesita hacer más.

Un funcionario de la UE familiarizado con las negociaciones dijo que probablemente habría una extensión de tres meses al Brexit para convertir las propuestas en un acuerdo legal.

"Aún quedan problemas grandes para combatir el contrabando y el fraude porque los esbozos británicos siguen siendo muy vagos", dijo el diplomático, que habló a condición de preservar el anonimato porque las conversaciones estaban en curso. "Hay aún muy poco movimiento".

Al arribar a Luxemburgo para una reunión, el canciller irlandés Simon Coveney dijo: "Cuanto menos digamos ahora, mejor".

Pese a sus reticencias, el ministro irlandés dijo que "es posible alcanzar un acuerdo, y es posible este mes. Puede ser posible esta semana. Pero aún no estamos ahí".

El canciller insistió en que es esencial que los negociadores tengan tiempo para limar las últimas asperezas.

"Aún queda mucho trabajo que hacer", añadió.

El desafío de mantener una frontera invisible —algo que apuntalaba la economía local y el acuerdo de paz de la región— ha dominado las conversaciones sobre el Brexit durante tres años, desde que los votantes británicos decidieron abandonar la UE en 2016.

En Londres, la reina dio un discurso esbozando un ambicioso programa legislativo para el gobierno de Johnson, aunque hay que críticos dicen que no se podrá concretar.

El discurso de 10 minutos que leyó la monarca de 93 años sentada en un trono dorado en la Casa de los Lores incluyó más de 20 propuestas, entre ellas implementar un acuerdo de retiro de la UE, si es que este se logra.

Tags relacionados