El periodismo tradicional busca alternativas ante cambios tecnológicos y vaivenes económicos

El periodismo tradicional vive un periodo difícil en su modelo de negocio que tiene en riesgo la continuidad de muchos medios, pero al mismo tiempo goza de prestigio como un valor de las sociedades democráticas, coincidieron expertos en la séptima edición del Festival Gabo que concluyó el pasado viernes en Medellín.

Durante tres días, periodistas de diferentes países se reunieron en esta ciudad colombiana para compartir las mejores historias de Iberoamérica y debatir sobre las perspectivas de un oficio al que los cambios tecnológicos y los vaivenes económicos parecen poner en jaque.

En el cierre del Festival Gabo las principales discusiones se ocuparon del futuro, tanto de los medios tradicionales como del periodismo independiente que cada vez atrae más profesionales movidos bien sea por el deseo de emprender e investigar por su cuenta o por la propia crisis que recorta empleos.

“La transformación en los medios es brutal”, dijo en el panel “¿Hacia dónde van los medios?” la directora del diario español El País, Soledad Gallego-Díaz, quien explicó que lo que sucede es “que el modelo de negocio ha cambiado totalmente y las herramientas son totalmente distintas”.

En su opinión, los avances tecnológicos que hacen que las personas tengan acceso más directo y en mayor volumen a la información obligan a los medios de comunicación a buscar “qué queremos hacer”, una tarea que no es fácil.

“Mover un periódico o un medio grande es muy complicado porque son como un acorazado”, manifestó.

En el fondo del problema está la financiación, cada vez más difícil por la notable disminución de ingresos por publicidad que son acaparados por un competidor inesperado, gigantes de la tecnología como Google o Facebook que se llevan buena parte del dinero que se mueve por este concepto.

“Tenemos que encontrar un modelo de financiación que no sea exclusivamente el de la publicidad que está controlado por las grandes empresas tecnológicas”, planteó Gallego-Díaz.

Con esa visión coincidió la directora del diario El Colombiano, de Medellín, Martha Ortiz, quien considera que “el modelo de negocio se rompió y los dueños de los medios tienen que superar el duelo de los márgenes de negocio que tenían”.

“Google y Facebook manejan un algoritmo que no es neutral y con ello manejan la publicidad”, dijo sobre el posicionamiento de las informaciones en los buscadores y en las redes sociales, que hace que quienes son más vistos sean más atractivos para los recursos que inyecta la publicidad.

Sin embargo, consideraron que el patrimonio que representa el buen periodismo que no se puede perder y que es clave para la subsistencia de los medios.

“El periodismo tiene una oportunidad hermosísima, privilegiada, porque es un jugador fundamental de la sociedad democrática y por eso hay que abrazarlo, hay que protegerlo y hay que dar las peleas que estamos dando para que el periodismo esté ahí”, manifestó Ortiz.

Al respecto, la directora de El País recordó que ese diario, que comenzó a circular en mayo de 1976, pocos meses después de la muerte del dictador Francisco Franco, “nació con una declaración explícita” de defensa de la democracia y es una publicación “que defiende el proyecto europeo, la construcción europea y que está volcado hacia América Latina”.

Para no quedarse solo en el diagnóstico de la situación, las dos directoras apuntaron también soluciones, como que el futuro del periodismo está en lo digital, lo que no significa la desaparición de los impresos.

“Vamos hacia medios de comunicación digitales, el papel lo mantendremos todo el tiempo que sea posible y lo queremos mantener, pero (el futuro está en) lo digital absolutamente, sin ninguna duda, es digital, punto”, dijo tajante Gallego-Díaz.

La preocupación por las dificultades para acceder a recursos que les permitan financiar sus operaciones también fue manifestada en otro panel por quienes hacen periodismo independiente.

“Antes, cuando nos encontrábamos en estos congresos, hablábamos nada más de los reportajes que hacíamos pero ahora (la pregunta) es ¿cómo te estás financiando?, ¿quién es el contacto?, ¿con qué temas les puedo llegar?”, manifestó la periodista mexicana Marcela Turati.

Según la directora de programas para América Latina del Media Development Investment Fund, María Catalina Colmenares, “el reto principal en términos del modelo es entender lo que se quiere hacer, cuál es el contenido, cómo me quiero diferenciar, cuáles son los canales de distribución y cuáles son las oportunidades de conectar con ese mercado”.

Las mujeres tuvieron una amplia participación en las charlas de la última jornada del Festival Gabo, en la que abordaron los retos de la cobertura de la desigualdad de género y el acoso sexual en el periodismo, asuntos ignorados hasta no hace mucho.

“Los medios están empezando a darle cabida a los temas de género, pero siempre a codazos, nunca con las puertas abiertas”, expresó la argentina Gabriela Figueroa, ganadora de la Beca Oxfam-Fundación Gabo de periodismo sobre desigualdad de género 2019.