NACIONES UNIDAS
Siria exige el retiro de fuerzas extranjeras
Siria exigió el sábado el retiro inmediato de todas las fuerzas extranjeras de su territorio y afirmó que se reserva el derecho de tomar medidas si no lo hacen.
“Estados Unidos y Turquía mantienen una presencia militar ilegal en el norte de Siria”, dijo el canciller Walid al-Moallem ante la Asamblea General de la ONU. “Todas las fuerzas extranjeras que operan en nuestros territorios sin nuestra autorización son fuerzas de ocupación y deben retirarse inmediatamente”.
A lo largo de casi nueve años, la guerra civil siria ha atraído a numerosos ejércitos y miles de milicianos extranjeros en la disputa por el poder.
La mayor parte del país está ahora bajo control del gobierno. Las excepciones son el baluarte opositor de Idlib, en el noroeste, y el noreste rico en petróleo que está en poder de grupos kurdos respaldados por Estados Unidos.
Días atrás, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, anunció la creación de un comité encargado de redactar una nueva constitución para Siria. La ONU espera que esto encamine al país hacia una solución política.
Guterres dijo el sábado que el comité se reunirá en Ginebra el 30 de octubre al emitir un documento sobre los términos de referencia y las normas de procedimiento del organismo.
Una vez aprobada la nueva constitución _o bien enmiendas a la constitución vigente de 2012_, se realizarán “elecciones libres e imparciales bajo la supervisión de las Naciones Unidas”, dice el documento.
Habrá un comité ampliado de 150 miembros, 50 cada uno del gobierno, la oposición y la sociedad civil, y un organismo menor con 15 miembros de cada sector.
La Santa Sede inició los discursos del sábado con una exhortación a la comunidad internacional a prestar especial atención a los conflictos en Siria y Yemen para “poner fin a los sufrimientos de tanta gente”.
El secretario de Estado vaticano, cardenal Pietro Parolin, destacó también el conflicto entre israelíes y palestinos como un “área de preocupación constante”.
Parolin también destacó la situación política y económica de Venezuela y Nicaragua, y alzó la voz por la protección de la Amazonía, arrasada por una serie de incendios.
Exhortó al mundo a proteger a las mujeres y niños, víctimas de violaciones y otras atrocidades en las guerras. No mencionó el escándalo de abusos sexuales por sacerdotes que ha remecido a la Iglesia católica.
Por su parte, el canciller mexicano Marcelo Ebrard dijo en su intervención ante la Asamblea General que México “ha recobrado su confianza en sí misma” y que tiene claras sus prioridades, entre las que se encuentra acabar con la corrupción y separar al poder económico del poder político. Otro objetivo es reducir la desigualdad.
“Tenemos más de 52 millones de personas en pobreza, no obstante que somos una de las economías más grandes del mundo”, dijo Ebrard.
El canciller destacó después la importancia del multilateralismo y puso como ejemplo de ello la conformación de un plan de desarrollo conjunto que México y los países centroamericanos han elaborado para reducir flujos migratorios.
“En el ámbito de América Latina y el Caribe, México considera se opone a medidas como el bloqueo a Cuba y las sanciones a los países”, dijo Ebrard.