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Prófugo exjefe de FARC Jesús Santrich sigue recibiendo pago como congresista

El Congreso colombiano realizó un segundo pago como parlamentario al exlíder de la FARC Seuxis Paucias Hernández, conocido como Jesús Santrich, pese a que está prófugo de la justicia, lo que generó fuertes críticas en diversos sectores del país.

En redes sociales se hizo viral este miércoles una imagen de un cheque girado a Santrich por casi 24 millones de pesos (unos 7.200 dólares), que está firmado por un funcionario y con el sello de la sección de pagaduría de la Cámara de Representantes.

La polémica por el cheque, que solo puede ser reclamado por Santrich, posicionó la etiqueta "Con el cheque de Santrich yo" como tendencia en Twitter.

Este pago se suma al que realizó el Congreso en junio pasado por más de 14 millones de pesos (unos 4.200 dólares) correspondiente a los 19 días que trabajó ese mes.

Pese a estar prófugo de la Justicia, al exjefe guerrillero se le sigue girando cheques porque aún conserva su escaño en la Cámara de Representantes, pues el Consejo de Estado no ha tomado una decisión sobre el caso.

Santrich asumió su curul en la Cámara por el partido FARC el pasado 11 de junio y 18 días después dejó plantados a los escoltas de su esquema de seguridad.

El exlíder de las FARC incumplió una cita con la Justicia Especial para la Paz (JEP), que lo había llamado por casos de secuestro y desapariciones forzadas cometidas en el conflicto armado por la guerrilla.

Según el Gobierno, Santrich estuvo hasta el 29 de junio en el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de Tierra Grata, en el departamento del Cesar (norte), donde excombatientes terminan de hacer su reincorporación a la vida en sociedad, y desde entonces se desconoce su paradero.

Es por ello que el pasado 9 de julio la Corte Suprema de Justicia dictó una orden de captura en su contra y pidió a la Interpol emitir una circular roja para su detención, luego de que tampoco se presentara a una indagatoria en un proceso de narcotráfico.

Por ese caso, el exlíder de las FARC es pedido en extradición por Estados Unidos, que lo acusa de narcotráfico, delito que habría sido cometido después del 1 de diciembre de 2016 cuando entró en vigor el acuerdo de paz firmado por el Gobierno y las FARC el 24 de noviembre de ese año.