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FRANCIA

Detienen a sospechoso, a sus padres y otra persona por explosión de Lyon

La policía francesa detuvo a un hombre de 24 de nacionalidad argelina sospechoso de ser el autor del atentado del viernes en el centro de Lyon que dejó 13 heridos, anunciaron el lunes las autoridades.

Además del joven, cuya identidad no fue revelada, la policía arrestó a sus padres y a otro estudiante también de nacionalidad argelina, presentado como "miembro de su entorno", según la fiscalía francesa.

Su hermana también fue interrogada por la policía pero no quedó detenida, agregó la misma fuente.

El joven arrestado es un estudiante en informática sin antecedentes judiciales, indicó el alcalde de Lyon Gérard Collomb. La fiscalía de París, encargada de la investigación por acción terrorista, lo considera sospechoso de la explosión.

La fiscalía había abierto el viernes una investigación por "intento de asesinatos en relación con una empresa terrorista y asociación terrorista criminal de malhechores".

El primer sospechoso fue detenido en la vía pública en el marco de un vigilancia en su domicilio, donde los investigadores sospechaban de la presencia de explosivos.

Según Collomb, lo arrestaron sin que se resistiese cuando bajaba de un autobús, y alzó los brazos ante la policía.

Bolsa de papel

La policía buscaba a un hombre que fue filmado cuando iba en bicicleta cerca del lugar de la explosión, vestido con camiseta verde de manga larga y bermudas, y cargando una mochila.

Un artefacto explosivo con TATP (triperóxido de triacetona), con tornillos o clavos en su interior fue colocado delante de una panadería en la esquina de dos transitadas calles peatonales del centro histórico de Lyon (sudeste).

Las autoridades francesas hallaron restos de un ADN no identificado en la bolsa de papel que contenía el paquete explosivo.

Trece personas –ocho mujeres, una niña de 10 años y cuatro hombres– resultaron heridas, y 11 de ellas tuvieron que ser trasladadas al hospital para ser atendidas.

Según la policía, más de 250 personas llamaron en las 24 horas que siguieron al llamado a testigos hecho por la policía el viernes.

El fiscal de París, Remy Heitz, había visitado el sitio del atentado el viernes por la noche con el ministro del Interior, Christophe Castaner.

El sábado, había dicho que se habían activado "todos los medios" para "llegar rápidamente a la identificación y la detención del autor de los hechos".

Francia ha sufrido desde 2015 una ola de atentados yihadistas sin precedentes que dejaron un total de 251 muertos.

El último antes del ataque del viernes en Lyon había sido en Estrasburgo (este) el 11 de diciembre de 2018, con un saldo de cinco muertos y diez heridos.