Panameños acudirán a las urnas hartos de corrupción
La ira por la corrupción descarada y el hastío por el estatus quo político están más presentes que nunca en el electorado panameño de cara a los comicios generales del fin de semana en que se elegirá al sucesor de Juan Carlos Varela, en cuyo quinquenio se desaceleró la economía de mayor crecimiento regional.
En este proceso electoral se ha visto la que quizá ha sido la campaña más corta e incolora desde la transición a la democracia tras la expulsión del dictador Manuel Antonio Noriega por la invasión de Estados Unidos hace tres décadas. Sin embargo, también ha sido la que ha generado mayor discusión sobre la corrupción política en un país que se vio enlodado por el escándalo internacional de los Papeles de Panamá y los sobornos repartidos por la constructora brasileña Odebrecht en América Latina.
El caso Odebrecht “es particularmente relevante en Panamá a la luz de los Papeles de Panamá”, dijo a The Associated Press Michael Shifter, presidente de Diálogo Interamericano, en alusión a que muchas de las sociedades fachadas y cuentas en ultramar que salieron a la luz tras las filtraciones masivas del bufete panameño Mossack-Fonseca se utilizaron para canalizar dineros de los sobornos de la constructora brasileña.
“La corrupción se convierte en tema aún más importante en el contexto del reciente desempeño económico lento del país”, consideró. “Muchos panameños están hartos de la clase política y han sido decepcionados por las sucesivas administraciones”.