SACERDOTE

Ernesto Cardenal ofrece misa en su casa 34 años después de suspensión papal

El poeta y sacerdote trapense nicaragüense Ernesto Cardenal ofició el viernes una misa en su casa de habitación, en Managua, 34 años después que el papa Juan Pablo II lo suspendiera "A divinis" por mezclar la religión con la revolución sandinista.

El intelectual nicaragüense, de 94 años y considerado actualmente como uno de los poetas vivos más importantes de Latinoamérica y a quien el papa Francisco lo absolvió "de todas las censuras canónicas", realizó una ceremonia sencilla, de comunidad, explicó su asistente, Luis Marina Acosta.

Cardenal, ganador del prestigioso Premio Reina Sofía de Poesía, el más importante de Iberoamérica, acudió a la eucaristía vestido de blanco y colocó sobre su cabeza un cintillo color café en vez de su clásica boina negra y una estola, según las imágenes transmitidas por sus colaboradores.

Cardenal fue asistido por un sacerdote nicaragüense y le acompañaron su asistente y dos amigas más de la familia.

En 1985, el autor del libro "El evangelio de Solentiname" fue suspendido "a divinis" por el ahora fallecido papa Juan Pablo II, que consideró incompatible su cargo político con su misión sacerdotal.

El 17 de febrero pasado, Cardenal concelebró una misa postrado en una cama de un hospital con el nuncio apostólico en Nicaragua, Stanislaw Waldemar Sommertag, tras la decisión del papa Francisco.

La misa con el nuncio fue la primera dirigida por Cardenal desde 1985, cuando fue suspendido por el papa Juan Pablo II para celebrar misas y administrar sacramentos por formar parte del Gobierno sandinista en aquella época.

El creador de "Oración por Marilyn Monroe y otros poemas" (1965) es uno de los autores vivos más importantes de Latinoamérica.

Conocido por su obra "Epigramas" (1961), Cardenal, a quien la edad y la salud no han logrado retirar del todo de la vida pública, es uno de los poetas nicaragüenses más laureados a nivel internacional.

Con obras traducidas a veinte idiomas, ha sido distinguido, entre otros reconocimientos, con la orden de la Legión de Honor en Grado de Oficial del Gobierno de Francia.

En 2010 fue propuesto al Premio Nobel de Literatura por la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).

En diciembre pasado recibió el Premio Internacional Mario Benedetti que otorga Uruguay y que dedicó al pueblo nicaragüense y al adolescente Álvaro Conrado, una de las primeras víctimas de las protestas contra el Gobierno de Daniel Ortega, que comenzaron en abril pasado.

El Premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda (2009) y el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (2012) están entre los más recientes e importantes galardones recibidos por el escritor.