Exjuez Sergio Moro dice que "el caso Lula" pertenece a su pasado

El ministro de Justicia y exmagistrado Sergio Moro, quien el año pasado decretó el ingreso en prisión de Luiz Inácio Lula da Silva, reiteró este jueves que el caso que envuelve al expresidente forma parte de su pasado.

"Como ya he dicho más de una vez el caso del presidente Lula pertenece a mi pasado", afirmó Moro en una rueda de prensa en Sao Paulo, tras ser cuestionado sobre la segunda condena por corrupción contra el líder del Partido de los Trabajadores (PT).

El exmandatario que gobernó Brasil entre 2003 y 2010, de 73 años, fue condenado el miércoles por segunda vez en menos de dos años por los delitos de corrupción y lavado de dinero.

La primera pena contra Lula fue interpuesta por Moro en julio de 2017 y fue ratificada a comienzos del año pasado por un tribunal en segunda instancia, que consideró probado que el antiguo líder sindical recibió un apartamento en el litoral de Sao Paulo a cambio de favores políticos a la constructora OAS.

Moro dejó la magistratura a finales de 2018 para asumir en enero el ministerio de Justicia y Seguridad Pública del Gobierno del presidente ultraderechista Jair Bolsonaro y fue sustituido entonces de manera temporal por la jueza Gabriela Hardt, quien el miércoles dictó una nueva condena contra Lula de 12 años y 11 meses de cárcel por corrupción.

Uno de los primeros pasos de Moro como ministro ha sido la preparación de un proyecto de reforma de leyes con el que pretende reforzar el combate al crimen y el cual presentó este jueves ante un grupo de abogados en Sao Paulo.

Recalcó que el paquete de medidas "anticrimen" que esta semana presentó al Congreso y a los gobernadores de Brasil "puede ser tratado en paralelo" junto con el proyecto que está siendo elaborado para reformar el sistema de pensiones y jubilaciones.

Las declaraciones de Moro se producen un día después de que el presidente de la Cámara de los Diputados, Rodrigo Maia, afirmara que la aprobación de la reforma del sistema de seguridad social es más prioritaria que el proyecto presentado por el titular de Justicia.

"Como el propio presidente dijo, las dos cuestiones pueden ser tratadas en paralelo. Una no perjudica a la otra. Por el contrario, eso solo demuestra el empeño del Gobierno del presidente Bolsonaro de enfrentar esas dos cuestiones que son las que más afligen a la población brasileña", declaró.

El ministro subrayó que el crimen organizado y la corrupción son dos de los principales problemas de Brasil y culpó a los últimos gobiernos de la ausencia de políticas públicas para enfrentar los desvíos de dinero.

"Es importante que disminuyamos la corrupción en Brasil porque eso vacía los recursos públicos que son importantes para tratar de esas otras cuestiones, como el crimen violento y el crimen organizado", agregó.