Miles de peregrinos acuden a misa que abre la JMJ de Panamá
Miles de peregrinos se congregaban en un paseo frente a la Bahía de Panamá para escuchar la misa de bienvenida que dará apertura formal a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que contará a partir de este miércoles con la presencia del papa Francisco.
Incontables pabellones patrios se podían ver en el Campo Santa María La Antigua, un espacio habilitado con una gran tarima y pantallas gigantes en la llamada Cinta Costera, el moderno paseo marítimo de la capital panameña a orillas del océano Pacífico.
El arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa, oficiará una misa de bienvenida a los peregrinos a partir de las 18.00 hora local (23.00 GMT) allí, el mismo lugar en el que Francisco se encontrará con los jóvenes el próximo jueves en una misa campal.
Pero los jóvenes comenzaron a llegar al lugar al menos cuatro horas antes de la homilía. Sonrisas y entusiasmo desbordan los peregrinos en esta tarde soleada y ventosa en la capital de Panamá, donde calles y avenidas cercanas al lugar de la concentración fueron tomadas por la policía como parte del amplio dispositivo de seguridad.
"Estupendo escuchar los cantos de ahorita, que están motivando, en espera de la Santa Misa que es una cosa fundamental: comenzar este encuentro con la eucaristía y terminarlo con la eucaristía del papa", declaró a Efe Huber Cáceres, un seminarista peruano del Seminario del Callao, quien, afirmó, participa por primera vez en una JMJ.
La espera era animada por agrupaciones musicales que se presentaban en la gran tarima levantada en la Cinta Costera para esta ocasión, una estructura de 8 metros de alto y cuatro pisos que pueden alberga a unas 2.400 personas.
"Estoy muy feliz, en verdad esta experiencia ha sido demasiado bonita ¡y apenas llevo un día!", expresó a Efe la peregrina panameña Isabel Borrás.
Con esta misa de bienvenida a los peregrinos comenzará oficialmente la JMJ, que se extenderá hasta el próximo domingo con la presencia de Francisco, quien llegará el miércoles por la tarde al país centroamericano.
El papa, quien cerrará la JMJ el próximo domingo, oficiará misas, visitará centros de reclusión y hogares de acogida, entre otras actividades oficiales, en las que hará un llamamiento para que se dé oportunidades a todos los jóvenes de Centroamérica, ha explicado el arzobispo Ulloa.
La organización local de la Jornada espera la llegada de al menos 100.000 peregrinos de todo el mundo que han completado su registro en el evento, que incluye un amplio dispositivo de seguridad que involucra al menos 30.000 agentes.
El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, dijo el lunes que la visita a Panamá del sumo pontífice "trae mucha fe y esperanza a la región" centroamericana, especialmente al Triángulo Norte (Honduras, El Salvador y Guatemala), convulsionado por el fenómeno de la migración masiva que alientan la extrema violencia, falta de oportunidades y la pobreza.
Además del drama de la migración, Francisco hablará de la defensa de la ecología durante la JMJ, en la que pronunciará 10 discursos, entre ellos 3 homilías y un ángelus.
La de Francisco será la segunda visita de un papa a Panamá después de la de Juan Pablo II en 1983 en la que solo estuvo un día, y la primera de Jorge Bergoglio a este país.