Huracán
Florence se debilita pero deja 13 muertos y amenaza de inundaciones
La tormenta Florence, que ha dejado hasta el momento 13 muertos en la costa atlántica de Estados Unidos, pierde fuerza y el domingo se redujo a depresión tropical, aunque las autoridades advirtieron de que la devastación que causó, principalmente las inundaciones, están lejos de terminar.
Según medios estadounidenses, el balance provisional es de 13 muertos, de los que 10 se produjeron en Carolina del Norte y los otros tres, en Carolina del Sur, entre las que se encuentra una mujer de 61 años que chocó su auto contra un árbol caído en la carretera.
Las ráfagas de viento y lluvia torrencial causaron daños importantes. Muchos caminos permanecen cortados por árboles y postes de la luz arrancados y por el agua acumulada.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) rebajó a Florence a depresión tropical el domingo por la mañana, aunque advirtió de que las "inundaciones repentinas y los desbordamientos de ríos continuarán afectando a una parte significativa" de Carolina del Norte y del Sur.
Las rachas de viento se redujeron a 56 km/h el domingo por la mañana, informó el NHC en su boletín de las 09H00 GMT. Las autoridades ahora están tratando de achicar el agua y ayudar a los habitantes atrapados por las inundaciones.
Florence tocó tierra el viernes como huracán categoría I pero luego se degradó a tormenta tropical y aún así siguió arrasando la costa este, dejando un tendal de árboles y cables de electricidad derribados y obligando a unas 20.000 personas a huir hacia refugios.
Alrededor de la ciudad de Hampstead, en la costa de Carolina del Norte, los evacuados intentaron regresar a su hogar para ver los desperfectos causados por la tormenta a pesar de que las carreteras estaban inundadas, según un periodista de la AFP.
El sábado muchas personas trataron de regresar a sus casas conduciendo por carreteras inundadas y llevando motosierras para quitar los pinos que atravesaban las rutas.
-Lluvias "colosales"-
El gobernandor de Carolina del Norte, Roy Cooper, alertó que transitar por las rutas es temerario.
"Todos los caminos del estado están actualmente en riesgo de inundación", dijo. "Mientras los ríos sigan creciendo y la lluvia cayendo, las inundaciones se extenderán. Más y más condados tierra adentro están librando órdenes de evacuación obligatoria", dijo.
Poco antes había alertado que la tormenta "está descargando colosales cantidades de lluvia: en algunos lugares se mide en pies, no ya en pulgadas"
En otra entrevista separada, Steve Goldstein, de la administración Nacional Oceánica y Atmosférica, dijo que algunas áreas recibieron lluvias de hasta dos pies (609,6 milímetros) mientras Florence se movía muy lentamente en el este de Carolina del Norte.
En New Bern, una ciudad de 30.000 cercana a la costa de Carolina del Norte e inundada desde el viernes, las autoridades rescataron a cientos de personas que habían quedado aisladas.
Más de 400 personas fueron rescatadas y 4.200 viviendas sufrieron daños en esta ciudad, explicó el alcalde Dana Outlaw.
Cuando llegó Florence, Charles Rucker, un maestro jubilado, solo había pasado cinco noches en la casa construida en 1830 que recién había comprado.
"Fue como si un tren bala hubiera irrumpido en mi sala", dijo a la AFP. "Estaba realmente aterrado", añadió.
-Riesgo de tornados-
La Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) movilizó a 1.200 personas para las operaciones de búsqueda y rescate. El Ejército y voluntarios de todo el país también ayudan en las tareas.
Alrededor de 1,7 millones de personas en Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia están bajo órdenes de evacuación voluntarias u obligatorias, y millones de otras viven en áreas que podrían verse afectadas por la tormenta.
Los meteorólogos prevén que en Carolina del Norte la acumulación de agua de las lluvias alcancen los 25 centímetros tierras adentro, y un metro en algunas áreas costeras.
Las autoridades no descartan que surjan tornados. "Algunos tornados son posibles en el sureste de Carolina del Norte y el noreste de Carolina del Sur", dijo la agencia nacional que atiende los huracanase.
El presidente estadounidense, Donald Trump, quien dio sus condolencias a las familias de las víctimas, visitará las áreas afectadas a principios o a mitad del semana próxima, "una vez que se determine que su visita no obstaculizará los esfuerzos de los servicios". rescate".