Piñera y Bachelet multiplican actividades en víspera del cambio de mando

La presidenta saliente de Chile, Michelle Bachelet, y su sucesor, Sebastián Piñera, multiplicaron el sábado sus actividades, concentradas en reuniones con gobernantes e invitados extranjeros a participar este domingo en la ceremonia de cambio de mando en el país austral.

En la antesala del sexto traspaso de mando que tiene lugar desde que Chile recobró la democracia, en 1990, tras la dictadura de 17 años de Augusto Pinochet, Piñera y Bachelet mantuvieron numerosas reuniones con los dignatarios y delegaciones que han llegado para la ocasión.

Entre ellos, el Rey emérito de España, Juan Carlos de Borbón, quien fue el primero en reunirse con el presidente electo, que en total tuvo once encuentros bilaterales en la jornada.

Don Juan Carlos llegó a la sede de la Academia Diplomática, en el centro de Santiago, junto al embajador de España en Chile, Carlos Robles Fraga y el secretario de Estado español de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Fernando García Casas.

Al encuentro, que se prolongó por cerca de 30 minutos, se incorporó también Roberto Ampuero, designado ministro chileno de Relaciones Exteriores por Sebastián Piñera.

Cuando terminó la cita, Piñera obvió el protocolo y acompañó al Rey hasta la salida donde lo despidió con un abrazo afectuoso.

Por la tarde, Don Juan Carlos tuvo también una reunión bilateral con Michelle Bachelet en La Moneda, donde posteriormente participó en una cena ofrecida por la mandataria en honor de los dignatarios visitantes.

Las bilaterales de Sebastián Piñera le demandaron gran parte del día y entre ellas se destacaron también las celebradas con los presidentes de Honduras, Juan Orlando Hernández; de Ecuador, Lenín Moreno y de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, además del presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.

También se ha anunciado oficialmente la presencia en los actos de los mandatarios de Argentina, Mauricio Macri; Brasil, Michel Temer; Bolivia, Evo Morales y de México, Enrique Peña Nieto.

Al final de la jornada, Piñera viajó a Viña del Mar, para alojarse en el palacio de Cerro Castillo, la residencia de verano de los presidentes chilenos, a pocos minutos de Valparaíso, donde tendrá lugar su investidura, en la sede del Congreso chileno.

Previo a su desplazamiento al parlamento, tendrá algunas reuniones, entre ellas, una con el presidente de Argentina.

Tras la ceremonia, ya como presidente en ejercicio volverá a Cerro Castillo para almorzar junto a todos los invitados y posteriormente viajará a Santiago donde cumplirá algunas actividades y pronunciará su primer discurso como titular del Ejecutivo chileno.

Michelle Bachelet, por su parte, tiene previsto llegar a La Moneda temprano este domingo, para despedirse y tomarse las últimas fotos con sus ministros y colaboradores, para luego dirigirse directamente a la sede del Legislativo para entregar el mando del Ejecutivo a Piñera, que lo ejercerá por segunda vez, tras haberlo hecho entre los años 2010 y 2014.

El sábado, previo a su reunión con el Rey Juan Carlos, Bachelet promulgó la ley que crea el Fondo de Infraestructura, en la última actividad pública y después mantuvo reuniones bilaterales con invitados del exterior, entre ellos el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross.

También se reunió con el canciller de Palestina, Riad Al Malki; el vicepresidente de la Asamblea Popular de China, Ma Peihua; la vicepresidenta para Asuntos Legales de Irán, Laaya Joneidi; el presidente del grupo Interparlamentario de Chile-Japón, Ryu Shionoya, y con los jefes de delegaciones extranjeras.

A la ceremonia del cambio de mando, según fuentes oficiales, asistirán 1.380 invitados, incluidos los presidentes de Argentina, Brasil, México, Perú, Honduras, Ecuador y Bolivia, cancilleres y representantes de los gobiernos de Uruguay, Colombia, Irán, Costa Rica, Serbia, Irlanda, Nueva Zelanda, Ucrania, Reino Unido, España, Polonia, Ghana y Japón, más miembros del cuerpo diplomático.

La investidura de los nuevos gobernantes en la sede del Legislativo es una tradición que se remonta en Chile a 1826, cuando se eliminó la denominación de Director Supremo al de jefe del Estado y se estableció el cargo de Presidente de la República.

El primer presidente fue Manuel Blanco Encalada, que sucedió a Ramón Freire, último Director Supremo.

Según la ley orgánica del Congreso chileno, el cuerpo legislativo debe instalarse el 11 de marzo siguiente a una elección de senadores y diputados y tras ello, el Congreso inviste al Presidente electo, aunque no existe un artículo que señale particularmente el inicio del mandato presidencial.