Centro de huracanes
María vuelve a degradarse a tormenta tropical mientras se aleja de EEUU
María volvió a degradarse de huracán a tormenta tropical en las últimas horas mientras prosigue su rumbo noreste y se aleja de la costa de Estados Unidos, mientras que el huracán Lee, de categoría 2, permanece en el medio del Atlántico, informó el Centro Nacional del Huracanes (NHC) de EEUU.
Los meteorólogos estadounidenses señalan en un boletín emitido a las 08.00 hora local (12.00 GMT) que María tiene vientos máximos sostenidos de 110 kilómetros, algo menos de los 120 kilómetros que registraba anoche y que lo convertían en huracán de categoría 1, sobre un máximo de 5.
La tormenta tropical, que ha ido variado ligeramente su intensidad en las últimas 36 horas, se mueve rumbo noreste, lo que lo aleja de la costa sureste de EEUU, donde ha dejado intensas lluvias en los últimos días.
Sin embargo, sus efectos no se sienten ya apenas, más allá del mar de fondo que se registra en buena parte de la costa este de EEUU, así como la costa atlántica de Canadá y los archipiélagos de Turcas y Caicos, Bermudas y Bahamas.
María, que a su paso la pasada semana por el Caribe dejó enormes daños materiales y más de medio centenar de víctimas mortales, según cifras provisionales, está previsto que se debilite al tiempo que acelera su velocidad de traslación y vira hacia el este durante el día de hoy, dejando atrás de manera definitiva la costa de EEUU.
Mientras tanto, Lee tiene vientos de 175 kilómetros por hora, aunque sigue alejado de zonas habitadas y se encuentra a 715 kilómetros al este de Bermudas y a unos 2.795 kilómetros al oeste de las Azores (Portugal).
Lee, que ayer miércoles se convirtió en el quinto huracán mayor (categorías 3, 4 y 5) de la temporada de la cuenca atlántica, es ahora de categoría 2 y se prevé que pierda todavía más fuerza en las próximas 48 horas.
Ese huracán se mueve hacia el norte a unos 15 kilómetros por hora y se espera que acelere su movimiento y gire hacia el nornoroeste en el día de hoy, para el sábado convertirse en una tormenta tropical.