CRISIS ECONÓMICA EEUU
Aseguradora pagó primas será cerrada en cuatro años
LA EMPRESA, EN PROBLEMAS, PAGÓ US$165 MILLONES A SUS EJECUTIVOS EN BONOS
WASHINGTON.- El presidente de la aseguradora estadounidense AIG, Edward Liddy, reveló ayer miércoles ante el Congreso que la empresa será reducida gradualmente de tamaño hasta quedar totalmente desmantelada en cuatro años. “Esta empresa se tornará más pequeña de aquí a fin de año, y más pequeña aún a fines de 2010”, declaró Liddy, quien añadió, “al reducirse su tamaño, disminuye el riesgo”. Al ser preguntado sobre el tiempo que tomará desmantelar la Unidad de Productos Financieros de AIG, cuyos manejos complejos fueron una de las principales causas de la debacle, Liddy contestó: “cuatro años. Liddy había sido convocado ante una comisión legislativa por el escándalo suscitado por las primas millonarias pagadas a sus ejecutivos con el dinero de la ayuda estatal que se le otorgó para salvarla de la quiebra. Devolución de dinero El dirigente explicó que había pedido a los ejecutivos beneficiados que devolvieran al menos la mitad de ese dinero, pero que algunos ya habían devuelto la totalidad. La audiencia empezó a las 10H00 (15H00 GMT) cuando numerosos periodistas y ciudadanos interesados en las declaraciones se agolpaban a las puertas de la pequeña sala. Liddy dijo ayer miércoles al Congreso que había pedido a los beneficiarios de primas escandalosas que hicieran “lo correcto” y devolvieran la mitad del dinero recibido. “Hemos oído al pueblo estadounidense hablar en voz alta y claramente en los últimos días”, expresó en la agitada audiencia en la Cámara de Representantes. “Consecuentemente, esta mañana pedí a los funcionarios de AIG Financial Products que hagan lo correcto”, dijo, exhortando a los empleados que cobraron primas de más de 100,000 dólares “a que devuelvan al menos la mitad de ese dinero”. “Algunos de ellos ya tomaron una posición y ofrecieron la devolución de la totalidad de esos pagos”, afirmó, sin ofrecer detalles. Presionado para fundamentar por qué era necesario pagar en primer lugar los 165 millones de dólares en primas a sus ejecutivos, Liddy explicó que el departamento de productos financieros todavía tenía 1,600 millones de dólares en inversiones de riesgo y que necesitaba funcionarios experimentados para resolver la situación. Liddy declinó revelar al Congreso los nombres de los ejecutivos de la empresa que recibieron primas tras el rescate de la aseguradora por el Estado, afirmando que estaba “preocupado” por la seguridad de esas personas. Al responder a la indagación del representante demócrata Frank Barney, se limitó a responder: “Su pedido es legítimo, pero yo quiero proteger a los empleados de la empresa”. “En el seno de AIG se han cometido errores en una medida que pocas personas podrían siguiera imaginar”, admitió ante la subcomisión de mercado de capitales, seguros y empresas financiadas con fondos públicos. Liddy aseguró asimismo que se estaba esforzando con su equipo dirigente para recuperar la compañía de seguros, a fin de poder devolver el dinero prestado por el Estado. LA CRÍTICA POSTURA DE BARACK OBAMA El presidente Barack Obama afirmó ayer que nadie en su gobierno creó los problemas que aquejan a la enorme firma aseguradora AIG, incluyendo los controversiales bonos abultados a sus ejecutivos, pero dijo que no transferirá a otros la responsabilidad de solucionar el problema. Obama defendió a su acosado secretario del tesoro Timothy Geithner. Algunos conjeturaron que el cargo del secretario peligraba por la manera en que manejó la situación creada por los millones de dólares en bonos que American International Group Inc. está dando a sus ejecutivos, aun recibiendo un cuantioso rescate financiero por parte del gobierno.