ALUMINIO

Arias espera Chávez no cierre una planta

SAN JOSÉ.- El presidente de Costa Rica, Oscar Arias, se declaró ayer viernes esperanzado en que su homólogo de Venezuela, Hugo Chávez, no cierre la planta procesadora CVG Aluminios Nacionales S.A. que opera en territorio costarricense, informó un comunicado oficial. “Esperamos que no se concreten los temores de los trabajadores, pues sería lamentable despojar de su sustento a aproximadamente 400 trabajadores y a sus familias, que suman unas 2400 personas”, manifestó Arias. El jefe de Estado costarricense agregó que “me es difícil creer la versión de un posible cese de operaciones de una fábrica sumamente eficiente y altamente rentable para el Gobierno de Venezuela”. Ayer viernes el diario local La Nación aseguró que Chávez se dispone a cerrar la planta de Alunasa, ubicada en Esparza, 100 kms. al oeste de la capital, debido a que se encuentra “molesto” por críticas que le formuló el pasado 1 de febrero Arias. En tanto, trabajadores costarricenses de la empresa Alunasa, pedirán al presidente Arias que supere las diferencias que mantiene con su homólogo venezolano Chávez, para evitar el cierre de la fábrica. “El próximo lunes voy a acudir a la presidencia junto con una delegación de trabajadores para pedirle al presidente Arias que procure evitar que el presidente de Venezuela cierre la planta de Alunasa”, dijo el diputado social cristiano Bienvenido Venegas. “Para la comunidad de Esparza, que es una de las regiones más pobres del país, el cierre de Alunasa sería un duro golpe, eso tendría fuertes repercusiones sociales”, declaró el diputado, que reside en esta comunidad. Ayer, la Cámara de Industrias de Costa Rica expresó su preocupación por el anuncio de un eventual cierre de Alunasa. “Se trata de una situación muy delicada, porque estamos hablando de 400 personas que podrían perder su empleo. Además hablamos de una zona cuya economía está fuertemente ligada al trabajo que produce esta firma”, indicó el presidente de los industriales, Jack Liberman. Alunasa da empleo a unas 400 pesonas que procesan bauxita traída de la Guyana para producir aluminio y algunos productos terminados, que exporta al mercado internacional con ventas anuales por alrededor de 50 millones de dólares.

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