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El malecón: Un lindo paseo con modernos monumentos
Malecón de Santo Domingo.
Le llamamos malecón, aunque su nombre oficial es Avenida George Washington y, en un corto trecho, Paseo Presidente Billini (ya en la Ciudad Colonial). En esta amplia vía junto a la costa, los árboles frondosos y varios monumentos modernos forman un escenario con el mar Caribe. Un sábado reciente decidí pasear en auto por el malecón para ver algunos. Bajando por la avenida Máximo Gómez, doblamos a la izquierda.
El obelisco parece entrelazado con los árboles.
Varios metros después aparece, en medio de la calzada, el monumento conocido popularmente como Obelisco Macho. “¿Ud. sabe que este es el único obelisco en el mundo pintado con murales?” Es Alberto Estévez Peña, el conductor del auto, quien habla. ¿Será cierto? El Obelisco fue levantado en 1937 para celebrar el cambio de nombre de la capital: de Santo Domingo, a Ciudad Trujillo. Para tomar una foto diferente tomamos la calle Presidente Vicini Burgos: el obelisco parece entrelazarse con los árboles.
De vuelta al malecón, a pocos metros, en el entorno del reconstruido fuerte de San Gil, está el llamado “obelisco hembra”. Es el monumento erigido en 1942, conmemorando “la suscripción del acuerdo de pago” de la deuda externa entre nuestro país y Estados Unidos, firmado en 1940 entre el senador Cordell Hull y el dictador Rafael Trujillo. La cancelación total de la deuda fue en 1947. (Datos: Guía de Arquitectura Santo Domingo). En la remodelación del malecón, al ampliar la acera el monumento quedó unido al ambiente del antiguo fuerte.
Obelisco y fuerte de San Gil.
Continuando la ruta
Proseguimos junto a este parque costero, donde apenas se percibe la columna conmemorativa de quienes perecieron el 27 de septiembre de 1908 rescatando a los náufragos de la fragata Aurora, y continuamos junto a cafeterías hasta divisar la escultura de Frey Antón de Montesinos, quien alzó su voz a favor de los indígenas. Al otro lado de la calle, un conjunto escultórico representa a una familia. Para leer la tarja intento desmontarme del auto, pero al abrir la puerta el calor me sofoca. “Doña Carmenchu, yo puedo retratarla”, dice Alberto. El monumento recuerda el inicio de la inmigración japonesa agrícola y pesquera, con la llegada del primer barco el 26 de julio de 1956. En la zona cercana había un faro, desmantelado y vendido para su provecho por un funcionario de la tiranía. (Quien esto escribe tomó las fotos para este artículo en Listín Diario).
Escultura de Frey Antón de Montesinos.
El sermón de Montesinos, decía Juan Alfredo Biaggi en “Santo Domingo, Llave de las Indias Occidentales”, es considerado como el inicio del derecho internacional moderno.