VIAJES
Excursión a Bonao: puedes pescar en estanque de parador
En este complejo exhiben en una casita objetos tradicionales del campo dominicano.
“Vamos a Bonao. Y a muy corta distancia, en la comunidad de Jayaco, te llevaré a conocer el parador El Anzuelo. Tiene estanques donde los visitantes pueden pescar”.
“¿Y uno pesca para que le cocinen o es sólo entretenimiento para entonces liberar?”
“Me parece que ambas cosas”.
Es la conversación que tenemos mi hijo Alexis y yo mientras transitamos por la autopista Duarte. Aproximadamente en el kilómetro 86 Alexis va despacio para no pasarse de la entrada hacia Jayaco y El Anzuelo.
Tras doblar a la derecha toma a seguidas a la izquierda hasta llegar al complejo ecoturístico. Rodeada de naturaleza, una amplia construcción de madera con techo de yagua y encima de ésta lo que puede ser aluzinc se ofrece interesante a nuestros ojos. Un cartel recuerda el aniversario de este proyecto: 11 de mayo del 2011: “Una historia que contar”.
Luego de estacionar el auto a la sombra, me llama la atención una pequeña casita típica construida de tablas. Alexis le toma una foto. Levantada junto al parador, con el tradicional colorido campestre de tonos contrastantes invita a conocer su interior. Aquí encontramos un pilón con la mano, una tinaja, muebles de palito, y otros detalles tradicionales de la vivienda campesina. ¡Qué linda!
Retornamos hacia la zona donde un grueso tronco de árbol con forma de herradura crece rodeado de un piso de azulejos de diversos motivos, y entramos al parador que cuenta además con una terraza y un gazebo.
En este preámbulo previo a llegar a los estanques descubrimos que aquí hay rincones montados especialmente para tomarse fotos. Es obvio que los propietarios buscan atraer al turista extranjero en general, también al dominicano que gusta del turismo interno, no sólo al que tiene el antojo de pescar en un estanque.
Crianza de peces
Caminamos hasta la barandilla sobre la cual nos recostamos para ver los estanques. Hay un estanque especialmente destinado a la crianza de peces para los platos del restaurante. En éste no permiten la pesca de entretenimiento.
Es en el estanque de al lado donde varias personas lanzan su anzuelo desde el interior del restaurante. O desde el gazebo, al otro extremo. Hay otros estanques, pero todavía no tienen peces.
A una empleada preguntamos si los visitantes tienen que traer su caña de pescar. “Pueden traerla, pero también pueden alquilarla por cincuenta pesos”. A nuestra curiosidad por el tipo de peces que crían en los estanques, va enumerando: pacú y pangasius, que viene a ser el mero, tilapia y bosúa. “El pescador se entretiene y tira de vuelta al estanque o se lo preparamos”.
Para cocinar
En uno de los estanques crían las carpas, en diferentes variedades, pero éstas son “para cocinar, no se pescan”, aclara una empleada.