VIAJES
Sevilla: en la calle Sierpes está La Campana
Es un lunes de temperatura sofocante en Sevilla. Estoy a los pies de la famosa estructura de las Setas, junto a mi hijo Alexis y su sobrina (mi nieta) Pamela, en la Plaza Encarnación. Hacia ella funciona la cafetería Doña Encarna. A ella entramos a tomar algo frío.
Un cuadro con un escrito cuyo fondo es la silueta de Doña Encarna me impele a acercarme y leer lo que dice. ‘En la antigua Cava de los Gitanos nació doña Encarnita, un ventoso día de otoño. Pizpireta y deslenguada, se pasaba los días pegada a las faldas de su madre; entre fogones y cucharas de palo’.
Prosigue con mucha gracia la descripción de la dueña que luego de abandonar Sevilla regresó ‘para cumplir su sueño: ofrecer el arte de la cocina tradicional sevillana con cierto toque vanguardista’. En la parte inferior del cuadro, en letras mayúsculas dice: ‘Este es un homenaje a toda madre y abuela cocinera’. (En uno de sus muros promociona en especial ‘Desayunos & Tapas’).
Tras beber un zumo de naranja me apetece llegar hasta la calle peatonal Sierpes, la más conocida vía de Sevilla, donde abundan las tiendas. Queda cerca. Vamos caminando.
Casi de sopetón, ya en la esquina de un extremo de Sierpes, tropieza mi vista con la confitería y pastelería La Campana. Alardea de maestros artesanos pasteleros desde 1885. En vista de que el merengue (‘suspiro’ le llamamos en República Dominicana) es uno de sus dulces tradicionales, pido uno. A una barra Alexis y yo nos sentamos. ¡Qué rico merengue! Pamela prefiere echar un vistazo a unos abanicos de mano en un local cercano. Ya al exterior, en la esquina donde la calle se estrecha, la fachada de El Cronómetro (fundado en 1901), destaca con seis relojes: cinco de idéntico tamaño uno junto al otro, y uno más grande en el tope. Todos marcan las 12:25. Es parte de la tienda Enrique Sanchís (nombre del fundador de El Cronómetro), con la cual hace ángulo.
Origen del nombre
La calle Sierpes se llamaba Espaderos hasta que en el siglo XV comenzó a conocerse como de la Sierpe. Luego de las Sierpes y finalmente Sierpes. Su nombre lo atribuyen a distintos orígenes: su forma serpeante; los adornos de serpientes en la cruz que estuvo en una de sus esquinas; el apellido de Álvaro Gil de las Sierpes, que tenía aquí su residencia; y por la Taberna de la Sierpe que funcionó en esta calle. (Fuente: Pepe Becerra: becerrita.com). Cada quien decide cuál versión aceptar.
Al presente
Desde el 23 de abril hasta el sábado 29 se celebra en el barrio de Los Remedios de Sevilla su famosa Feria de Abril. Cuenta con más de mil casetas entre públicas y privadas. Son días y noches de actividades sin parar: música, comida, paseos...