Desfiles
Hollywood, México, Corea... destinos de las “colecciones crucero” de la moda de lujo
Las colecciones “resort”, presentadas por un puñado de marcas en varias partes del mundo en mayo para una distribución en noviembre, aparecieron hace un siglo para responder a la demanda de una rica clientela que partía en crucero durante las vacaciones del invierno boreal.
Chanel en Hollywood, Dior en México, Gucci en Seúl y Vuitton en una pequeña isla italiana. Las grandes marcas de lujo organizan espectaculares desfiles en países lejanos para las llamadas “colecciones crucero”, componentes clave para las firmas tanto para la imagen como a nivel comercial.
Las colecciones crucero, o “resort”, presentadas por un puñado de marcas en varias partes del mundo en mayo para una distribución en noviembre, aparecieron hace un siglo para responder a la demanda de una rica clientela que partía en crucero durante las vacaciones del invierno boreal.
“Poco a poco, estas colecciones se han convertido en muy importantes en nuestro ecosistema”, dice a la AFP el presidente del departamento moda de Chanel, Bruno Pavlovsky.
A diferencia del “ejercicio impuesto” de prêt-à-porter y de la alta costura, donde se tiene que “convencer” en 15 minutos a un público que va de un desfile a otro, las colecciones crucero en primavera son “momentos de intercambio privilegiados” con los países y los clientes.
“Estas colecciones se entregan muy pronto a las tiendas de todo el mundo y su duración de vida es más larga”, añade.
Contactadas por la AFP, las marcas no quisieron dar cifras sobre este tipo de colecciones, pero todas señalan su carácter estratégico.
“Las colecciones de pretemporada a menudo se venden mejor y generalmente no tienen desfiles, salvo para las casas que hacen los cruceros”, explica a la AFP Benjamin Simmenauer, profesor del Instituto francés de Moda.
“Cuando hacemos un desfile en Seúl o en Shanghái, se observa en los días que siguen mucha actividad en las tiendas locales”, añade.
“La colección crucero tiene una gran visibilidad y tiene un papel clave de su salida, durante las fiestas de Navidad”, asegura Dior en una respuesta escrita a la AFP.
“Explorar las culturas”
Dior, confrontado estos últimos años con reproches de apropiación cultural, especialmente en México, colaboró con artesanos locales para su desfile crucero el sábado en este país latinoamericano, en homenaje a Frida Kahlo y mostrando bordados con motivos florales.
Es una manera de “evitar la crítica”, sobre todo con estos desfiles que conllevan “desplazamientos faraónicos”, advierte Benjamin Simmenauer.
Según Dior, estos espectáculos “permiten explorar en profundidad la excelente artesanía de diferentes culturas (...) y mostrar mundialmente la belleza de las técnicas ancestrales en el centro de lugar simbólicos extraordinarios”.
Para Maria Grazia Chiuri, estilista de las colecciones de mujer de Dior, también fue la ocasión de defender la causa de la mujer, cuando presentaron al final del desfile vestidos blancos con detalles rojos, al ritmo de la “Canción sin miedo”, un himno feminista de Vivir Quintana para denunciar los feminicidios en México.
Esta semana, Catherive Deneuve, Cate Blanchett, Emma Stone y Léa Seydoux viajaron a Isola Bella, una pequeña isla en el lago Mayor, en el norte de Italia, para un desfile crucero barroco de Louis Vuitton, que desde 2014 lleva a cabo este tipo de espectáculos en plena naturaleza o dentro de grandes obras arquitectónicas.
El hecho que Chanel escogiera Los Ángeles, por ejemplo, es también una forma de recordar que Gabrielle Chanel diseñó vestuario para el cine en Hollywood en los años 1930.