salud sexual
¿Qué hay que saber sobre el pene? Una especialista resuelve dudas y mitos
Son muchas las falsas creencias que giran en torno a este órgano masculino, que supone un tabú para muchos
El pene es un tema que siempre despierta una risa incómoda, pero que afecta al ego y a la salud de la mitad de la población. Si las mujeres van al ginecólogo una vez al año como mínimo, ¿por qué los hombres no tienen anualmente una cita con el urólogo?
Son muchas las falsas creencias que giran en torno a este órgano masculino, que supone un tabú para muchos. La doctora aborda desde los falsos tópicos sobre el tamaño y las erecciones hasta la salud sexual y el envejecimiento.
EFEsalud ha hablado con Blanca Madurga, quien nos ha contado desde las principales preocupaciones que observa en consulta hasta aquellos temas que pocos se atreven a preguntar.
¿Por qué hay tanto tabú sobre el pene? ¿Conviene desmitificarlo?
Por supuesto. Primero, hay muchísimo tabú porque al hombre le cuesta mucho reconocer sus debilidades.
Parece que el hombre no puede fallar nunca, que siempre tiene que estar a punto, que es el “macho alfa”. Todas estas connotaciones hacen que cuando tienen un problema sean incapaces de contárselo a nadie por miedo a que se rían o les digan “tú eres un impotente”, palabra que no me gusta absolutamente nada.
Los mitos hay que derrumbarlos. Todos somos seres humanos y todos tenemos nuestras fortalezas y nuestras debilidades. Y el hecho de escribir este libro es para romper todos esos mitos y abrir un camino a los hombres para que puedan hablar libremente, que sepan lo que es normal y lo que no es normal e informarles.
¿Cuáles son los principales mitos sobre el pene?
Bueno, el principal mito que persigue a los hombres desde que son pequeños es con el tamaño del pene. Todos los hombres se quieren poquito y se miran con poco aprecio a ellos mismos y siempre creen que tienen el pene pequeño. Piensan que si tuvieran un pene más grande van a tener más satisfacción sexual o a proporcionar mayor satisfacción sexual a sus parejas. No hay que basarse solo en el tamaño del pene.
Hay mucha leyenda urbana. Por ejemplo, se suele decir que la masturbación afecta al rendimiento deportivo. Sin embargo, el sexo es un ejercicio físico por lo que se puede tomar una relación sexual previa a un partido como un calentamiento.
¿Existe una medida normal del pene?
La medida normal del pene está completamente estudiada. Hay muchísimos trabajos serios al respecto, pero cada uno tiene una vara de medir y nunca mejor dicho. Independientemente de si les mide 30 o 10 cm, lo que tienen que saber es utilizarlo.
La mejor forma de medir el pene es en erección y por la cara ventral. Hay unas tablas perfectamente establecidas del tamaño desde que el feto está dentro del útero de su madre en la gestación hasta que nacen. Por ejemplo, si un bebé es prematuro, lo va a tener más chiquitito que si ha nacido a término.
Cuando llega la efervescencia de la testosterona del adolescente, desarrolla su cuerpo y por ende también desarrolla su pene y ya alcanza el tamaño con el que se va a quedar para toda la vida.
Es a partir de los 50 o 55 años cuando el pene puede empezar a hacerse un poquito más pequeño, pero la disminución de tamaño es mínima.
Sabemos que un pene es normal porque entre muchos trabajos, algunos de más de 50.000 hombres, han recogido todos los tamaños y se ha hallado la media del individuo, que está aproximadamente en los 12 o 15 cm.
Sabemos que ahora mismo los jóvenes de 10, 20 años para acá tienen el pene más grande porque también son más altos. La alimentación ha cambiado, es más proteínica y al desarrollarse más el pene les crece en consonancia.
¿Cómo afecta la pornografía a la salud sexual?
La pornografía en sí no es mala. Lo que no me gusta es que los niños puedan tener acceso al porno en internet a partir de los 9 años porque es una mente por formar.
No puede considerar que lo que pasa en una película porno es lo normal, porque eso no le va a llevar más que a tener unas expectativas altísimas que no va a cumplir en su vida y le va a llevar a traumas, a depresión y ansiedad porque no va a cumplir con eso.
El porno no es el sexo habitual, el porno tiene sus trampitas, tiene sus cámaras, sus ángulos… está todo perfectamente estudiado.
¿Afectan las redes a las creencias sobre el pene?
Las redes afectan muchísimo y lo que hacen es desinformar. El engaño y la mentira que corren por las redes es enorme.
En una revisión que me pidieron para una conferencia sobre sexualidad masculina, me puse a “bichear” por Internet y busqué: tamaño del pene y agrandamiento de pene.
De las 300 páginas que miré, solamente había dos páginas de Internet que estaban escritas por urólogos muy serios que decían la verdad sobre las posibilidades de agrandamiento del pene. Todo lo demás era un comercio obsceno de productos milagrosos.
Uno decía que iba a hacer crecer el pene con una crema 10 cm. Más de uno ha picado y lo mejor que le puede pasar es que sea vaselina y no le pase nada. Son muchos los desastres que se pueden hacer con las terapias low cost para mejorar el rendimiento del pene.
¿Las redes pueden minar la autoestima de los hombres?
Una cosa que me llamaba la atención en estas páginas eran las composiciones. Te mostraban a hombres guapos muy deprimidos, parecía que iban a llorar, como que poco menos que se iban a tirar por una ventana, con una un lenguaje corporal que reflejaba muy baja autoestima. Al lado se mostraban mujeres guapísimas mirándoles con cara de asco, como diciendo: “tú eres muy guapo pero no funcionas, la tienes muy pequeña”. Esta gente que es carne de psicólogo, porque la depresión y la ansiedad están a la orden del día en estos temas.
¿Qué es la disfunción eréctil y qué tipos hay?
La disfunción eréctil es la imposibilidad de tener o de mantener una erección el tiempo suficiente para poder tener una relación sexual satisfactoria, cuando esta no tiene por qué durar 3 horas, ni debe tener una dureza pétrea.
Los principales tipos de disfunción eréctil son la psicológica, la orgánica y la mixta, aunque normalmente nos gusta hablar de que pueden ser primariamente psicológicas y acaban en orgánicas o primariamente orgánicas que acaban en psicológicas.
¿Cuáles son las principales urgencias en las consultas de urología?
Con respecto a los testículos, la torsión testicular es una urgencia que tenemos que atender rápidamente.
La urgencia más común, aunque no es la más grave, se llama parafimosis. Esta se da en sujetos que no están operados de fimosis cuando el anillo del prepucio se queda en la base del glande y lo estrangula. Normalmente esto ocurre cuando se bajan el pellejo para tener una relación sexual o lavarse pero luego no se lo suben. Para cuando les empieza a molestar y a doler, ya son incapaces de subirse ese pellejo para arriba. Tienen que ir a urgencias rápidamente para poder reducirla.
La urgencia más llamativa es la fractura del pene, aunque afortunadamente no es frecuente. Esta tiene solución, pero es un cuadro muy brutal porque ves como aparece en urgencias un pene completamente negro por el hematoma. Es un cuadro severo y que hay que atenderlo rápidamente.
¿Tres consejos para la salud del pene?
Una higiene adecuada.
Basta con lavarse una vez al día o a lo sumo dos después de realizar deporte o haber mantenido una relación sexual. Para mantener la higiene basta con seguir estos pasos: bajar el pellejito, limpiarlo (para los pacientes que no están circuncidados), secarlo y volver a subir el pellejito.
Llevar una alimentación saludable.
Sabemos que la disfunción eréctil es un síntoma, no es una enfermedad como tal cuando es de origen orgánico (por una enfermedad cardíaca, diabetes, hipertensión…). Por eso es importante desarrollar buenos hábitos alimenticios.
Practicar deporte.
La obesidad es el peor enemigo del pene. Por eso se recomienda hacer ejercicio acorde con la edad de cada persona. Manteniendo una rutina constante, la erección del pene va a durar muchísimo más tiempo.
¿A qué edad hay que empezar a hablar de sexo con los hijos?
En cuanto empiezan con la adolescencia. No hay que tener miedo, hay que ser muy francos con los hijos.
Cuando empezamos a hablar con un niño de 13 o 14 años, sabemos que probablemente ya ha pasado por varias páginas porno y ha hablado con todos los amigos mayores del colegio…
Esa conversación hay que tenerla porque crea un vínculo de confianza respecto al sexo porque no solamente hablamos de embarazos no deseados, sino que hablamos de los riesgos de las enfermedades de transmisión sexual (ETS), que no van a encontrar por Internet. Hablarles de los preservativos es la mejor profilaxis que se les puede dar a esa edad.
También hay que decirles que no tengan miedo a contar con sus padres porque son las personas que más le van a querer en el mundo y son los que mejor les van a poder ayudar.
¿Qué aconseja para la prevención de ETS?
Tenemos que enseñar otra vez a usar los preservativos. Sería bueno que desde las instituciones y el Gobierno se volvieran a poner en marcha campañas para la prevención de enfermedades de transmisión sexual como aquel “póntelo, pónselo” que fue tan famoso en los años 80. Fue una campaña buenísima, donde aumentó muchísimo la venta de preservativos en todo el mundo en general y en España en particular y se previnieron muchas ETS.
No solamente hablamos de los jóvenes, hablamos también de las personas mayores. Cuando pierden el miedo al embarazo y por lo tanto dejan de usar preservativos, pueden ser contactos de riesgo porque hay enfermedades silentes que no vienen de la promiscuidad sexual. Entonces la prevención es importante siempre y a cualquier edad.
¿Influye la salud mental en el funcionamiento del pene?
Muchísimo. Una de las cuatro categorías del estímulo sexual son los momentos olfativos, los cuales son muy importantes por toda la cascada bioquímica que se empieza a producir en el cerebro. El pene se activa en la cabeza.
Cuando uno tiene un problema económico, laboral, familiar, de salud, lógicamente su cerebro está ocupado y su pene no va a funcionar por mucho estímulo visual u olfativo que tú le pongas por delante.
Una vez tratado, vuelve a funcionar. Si tú te crees que tienes una disfunción eréctil y no la tienes, tienes un problema serio que requiere un terapeuta. En el momento en que tú te crees que tienes una disfunción eréctil de origen psicológico, tiene que ser tratada por un especialista, que los hay muy buenos.
¿Qué opina sobre el uso de la viagra?
Ahora la Viagra tiene que estar recetada por un médico, no hay venta libre. Es un gran fármaco que nos revolucionó las consultas para bien porque pudimos ofertar a nuestros pacientes una alternativa. Y de ahí pasábamos a la cirugía.
Tiene muy buenos resultados. Salió al principio con una campaña de marketing tremenda. Aun así, a su vez surgieron bulos alegando que había muerto algún paciente cuando la viagra es un medicamento seguro si se toma como prescribe un especialista.
Aumenta la vascularización, cuando empieza a generarse la dopamina a través de los neurotransmisores. Si tú no tienes en la cabeza la idea de tener una relación sexual y las ganas de tener una relación sexual, aunque te tomes una caja de Viagra, no te hace ningún efecto. Esto no funciona solo.
El alcohol, por supuesto, hace que el efecto de la Viagra disminuya muchísimo y no va a conseguir una erección lo suficientemente dura y duradera para poder tener una relación satisfactoria
¿Qué mensaje lanza a todos los hombres que no han leído su libro todavía?
Pues que no tengan complejos, que no pasa absolutamente nada. Si tienen un problema, que vayan al especialista, que vayan al andrólogo. Nosotros estamos ahí, y no nos reímos de nadie ni juzgamos a nadie, todo está bien y nosotros podemos ayudarles.