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En Playa Bonita con un tiburoncito a su espalda

Carmenchu Brusíloff

Carmenchu BrusíloffLISTÍN DIARIO

En Playa Bonita, Las Terrenas, a las 5 de la tarde del pasado viernes, Ángel y Fausto se zambullían en sus aguas. Pese a la marea alta, el agua les llegaba como máximo a la cintura, pues estaban a solo a 10 metros de la playa, donde se encontraban Rossy y Miguelina. De pronto, Fausto levanta hacia Ángel una mano y con mucha sangre fría le dice: “Vamos a salir. Hay una aleta detrás de ti”. Ángel cree que es una broma y voltea la cabeza. Justo a su espalda viene brincando un pequeño tiburón. Sin dejar de mirar a los tiburoncitos (resultó que eran tres) fueron saliendo lentamente con escaso movimiento. Según explica, “si hubiera estado en la profundidad habría que quedarse quieto. Los tiburones tienen un aleteo de giro cuando van a atacar”.

¿Y el salvavidas no avisó?

“En estas zonas de grandes playas no hay salvavidas cerca. Había un Politur en bici cerca y se lo comuniqué”, cuenta Ángel, recordando una experiencia en Miami Beach, donde tienen salvavidas. “Allí nos pasó lo mismo: una madre tiburón y dos pichones estaban pegados a la orilla, y llamaron con calma a salir”. (Las Terrenas tiene una barrera coralina que impide la entrada de tiburones, pero al estar la marea alta los tiburoncitos pasaron por encima de ella. Al día siguiente no había rastros de ellos).

“¿Qué nos impide soñar?”

En el último boletín salesiano me tropecé con un título que atrapó mi atención: “¿Qué nos impide soñar?” El texto estaba dirigido a la comunidad salesiana en general, sacerdotes y laicos, y daba tres razones. Extraigo una de ellas y la adapto, pues puede aplicar a cualquiera de nosotros para hacernos reflexionar. “La búsqueda permanente de ‘views’ y ‘likes’ tienen a las personas en un estado en donde se olvidan las necesidades de nuestros destinatarios y se concentran en el quedar bien delante de un superior. Sin importarles a quiénes afectan en su búsqueda por llenar un vacío existencial”. Yo pregunto, ¿cuántas veces al día miramos el teléfono móvil para ver cuántos “Me gusta” han dado a la foto en IG, o cuántas personas han visto la “story”? Nos estamos auto esclavizando y ni cuenta nos damos.

“Van a tener el supermercado más bonito de Santo Domingo”

El Supermercado Nacional del CCN, en la esquina 27 de Febrero con Lincoln, está en remodelación. Cambiaron de sitio muchos productos y uno andaba perdido buscando alguno. Pero ya la semana pasada en varios pasillos colgaban letreros. A un supervisor de la remodelación, le comenté “¡Ya tienen letreros”! “Esos son temporales,” dijo. Y tras hablarme de la remodelación exclamó entusiasta: “¡Van a tener el supermercado más bonito de Santo Domingo!”. ¡Lo esperamos!

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