Importancia de estudiar por vocación y hacer lo que queremos como misión de vida
Recuerdo cuando al salir de bachillerato, quería estudiar Psicología. Allá, por los años 80, decir que se quería estudiar una carrera como esta, o Sociología, era equivalente a decir “no voy a conseguir trabajo jamás”. Eran muy pocos los psicólogos locales conocidos, y que encima, tuvieran éxito en la carrera. Eso hizo que cuando hablaba de lo que quería hacer, recibiera respuestas como “piénsalo bien”, “¿estás segura?”, “¿qué tú vas a hacer con un título de psicóloga?”. Estos, entre otros muchos comentarios era lo que recibía una y otra vez.
Fue por esos años, que comenzó a tener éxito la carrera de Hotelería y Turismo, lo cual fue una alternativa atractiva para mí y muchos compañeros que hasta el día de hoy conservo como amigos, tanto de la universidad, como de mis trabajos en el área.
Me embarqué en esa aventura de estudiar esta carrera, nueva, fresca y divertida. Lo hice por más de 10 años, entre estudios, viajes y trabajos en hermosos hoteles. Sin embargo, llegó el momento donde ésta no me ofrecía lo que se podría llamar “sentirme plena en mi carrera”. Y fue entonces cuando decidí dar el giro de 360 a mi vida e iniciar nuevamente el camino de los estudios, ya pasado el tercer piso de mi vida.
Como no estaba conforme con lo estudiado, decidí hacer la carrera de Psicología, que, en efecto, fue siempre la que me gustó. Hice cursos, talleres, congresos, maestrías y como nada, ya han pasado más de 20 años y, puedo admitir que, aunque no me arrepiento de haber pasado por la Hotelería, y todas las experiencias adquiridas, hoy puedo decir que estoy más cerca de esa plenitud en el ejercicio de mi profesión que llamo orgullosamente psicoterapeuta.
Nunca es tarde para iniciar algo que queremos, a veces nos va a costar más, a veces menos, pero vale la pena lanzarse e intentar hacer eso que al final, nos hará sentir cierta plenitud en lo que sea. Eso que hagamos en nuestra vida. Si nos encontramos en un momento de estancamiento, reconocerlo es importante, primero nos preocupamos y luego nos ocupamos, tomamos acción, si no podemos solos, es importante buscar ayuda.
Carmen Virginia Rodríguez, M.A., psicóloga clínica Grupo Profesional Psicológicamente