La Vida

Folcloreando

La Vieja Belén

XIOMARITA PÉREZArchivo LD

Xiomarita PérezSanto Domingo, RD

La tradición de dar regalos después de la Epifanía o fiesta de los Reyes Magos se ha mantenido como una costumbre de darle esperanza a quienes no fueron favorecidos.

Aunque en otros países existe el personaje, los dominicanos lo hemos criollizado, adaptándolo a nuestra realidad, con la esperanza de que la imagen de la Vieja Belén se mantenga viva en las mentes inocentes de los niños y dé nostalgia a los adultos que la disfrutaron en su infancia.

La escritora Julia Álvarez, en su libro “El mejor regalo del mundo: la leyenda de la Vieja Belén”, editado por Alfaguara del Grupo Santillana, en una edición inglés-español, señala que algunos estudiosos dominicanos creen que la Vieja Belén tuvo su origen entre los inmigrantes ingleses que vinieron al país a trabajar en la industria azucarera.

Otros dicen que existe una leyenda popular italiana de una bruja anciana llamada La Befana, lo que no descarta el escritor y antropólogo Marcio Veloz Maggiolo en su libro “Trujillo, Villa Francisca y otros fantasmas”, que esa Vieja Belén llegara a nuestro país con los italianos hace varios siglos.

Ojalá que el Ministerio de Educación refuerce esas tradiciones, incentivando a los profesores para que transmitan a los estudiantes esas tradiciones y que realicen dinámicas vistiéndose de la Vieja Belén, para que siga en la memoria de todos los dominicanos, dentro y fuera del país.

Con el nombre de la Vieja Belén solo se conoce en República Dominicana y debe mantenerse viva la leyenda, no para el consumismo, sino para protegerla recreando la tradición.

Tags relacionados