Las plantas adecuadas y un poco de cariño pueden ayudar a que su jardín supere el calor

Con un calor récord en muchos lugares del país y del mundo, mis redes sociales se están llenando de lamentos de los jardineros y fotos de sus plantas anuales y perennes caídas.

Aunque mis tomates en los suburbios de Nueva York se han estancado en verde durante las últimas semanas, mi jardín de flores está prosperando. Esto a pesar de tener que soportar temperaturas de 100 grados, principalmente sin riego suplementario (he regado mis macizos de flores y bordes solo dos veces este verano, e incluso entonces, solo como precaución).

Pero no estoy haciendo nada especial para convertir a mis plantas en superhéroes. Todo lo que hice fue seleccionar los correctos en el momento de la siembra y plantarlos con TLC.

Para ahorrar agua, dinero y dolores de cabeza, investigue qué plantas son nativas de su área. Puede comenzar su búsqueda con los recursos en el sitio web de Homegrown National Park .

En mi región de Nueva York, eso significa plantas perennes como el bálsamo de abeja (Monarda didyma), la Susan de ojos negros (Rudbeckia hirta), la equinácea morada (Echinacea purpurea), la pluma gay (Liatris spicata), la vara de oro gris (Solidago nemoralis), la coreopsis de hoja de lanza (Coreopsis lanceolata), ásteres de Nueva York (Aster novi-belgii) y Nueva Inglaterra (Aster novae-angliae) y hierba mariposa (Asclepias tuberosa), todos temas recurrentes en mi jardín.

Pero también tengo algunas plantas perennes de buen comportamiento, no nativas, tolerantes al calor y la sequía en mis macizos de flores y plantas anuales en macetas.

Las impaciencias “Bounce” resistentes al moho, por ejemplo, hacen honor a su nombre en mis contenedores, recuperándose del marchitamiento por calor con un buen remojo al final de un día brutal.

Las plantas suculentas anuales y perennes, como los sedums (también llamados stonecrop), son muy tolerantes al clima seco y cálido debido a sus hojas gruesas y llenas de savia que, como la joroba de un camello, almacenan humedad y la liberan cuando las plantas la necesitan. él.

En condiciones de calor extremo, especialmente cuando ese calor es seco, la humedad del suelo se evapora rápidamente y las plantas recurren a sus propias reservas limitadas de humedad para rehidratarse. Esto requiere que dirijan su energía, que debe gastarse en el crecimiento, la floración, la fructificación y la reproducción, hacia el enfriamiento y la hidratación. El estrés a menudo los agota.

Cuando las plantas son nativas de una región, naturalmente han desarrollado sistemas de raíces extensos y profundos que pueden alcanzar fuentes de humedad distantes cuando el área inmediata a su alrededor se seca.

Sin embargo, muchas especies exóticas, incluida la mayoría de las anuales, tienen sistemas de raíces superficiales. Eso significa que deben confiar en las pocas pulgadas superiores del suelo para todas sus necesidades de agua. Cuando se seca, ellos también.

Otras plantas que resisten bajo un calor intenso incluyen la angelonia, la lengua de barba (Penstemon spp.), la begonia, el millón de campanas (Calibrachoa spp.), la hierba gatera (Nepeta spp.), la flor de seda (Ageratum spp.), la lantana, la lavanda (Lavendula spp. .), caléndula (Tagetes spp.), rosa de musgo (Portulaca oleracea), petunia, salvia, verbena y zinnia.

CONSEJOS DE PLANTACIÓN

Al plantar, siempre espolvoreo los cepellones con hongos micorrizas en polvo , que colonizan las raíces y ayudan a las plantas a tolerar el estrés ambiental, incluido el calor severo. También los trato con una dosis mensual de una emulsión de pescado que contiene algas marinas y un producto de vitaminas, hormonas y algas marinas.

Se ha demostrado que las algas marinas, que incluyen algas marinas, mejoran la tolerancia al estrés en las plantas . Creo que el protocolo también ayuda a las plantas a adaptarse rápidamente después de dividirse y trasplantarse.

Finalmente, una aplicación liberal de mantillo es la cereza proverbial sobre su suelo. El mantillo no solo mantiene las cosas ordenadas, sino que también suprime las malas hierbas, mantiene uniforme la temperatura del suelo y retiene la humedad del suelo, lo que puede significar la diferencia entre la vida y la muerte de las plantas cuando hace calor.