MENUDO
La Hora del Té del Listín empezó en su centenario
Carmenchu Brusíloff
Corría el mes de marzo de 1989 cuando surgió la idea de crear La Hora del Té, e iniciar así las celebraciones del centenario del Listín Diario que se cumpliría el 1 de agosto. El viernes 7 de abril de 1989 se publicaba la primera Hora del Té. Nuestra invitada: doña Renée Klang de Guzmán, ex Primera Dama del país. En el salón Arturo Pellerano Alfau, ubicado en el segundo piso del edificio, Mirka Morales, directora de Relaciones Públicas del Listín, Claudine Nova, Wendy Cepeda, Taty Asencio y yo, del equipo Femenino y de Viajes (es decir, Sociales) fuimos las anfitrionas y entrevistadoras de doña Renée, quien estaba acompañada de su hija Sonia Guzmán de Hernández.
Un papel de una Primera Dama: ‘la gran bocina’
En la entrevista con doña Renée Klang de Guzmán, aparte de hablar de la niñez, un tema obligatorio, pues fue la creadora del Consejo Nacional para la Niñez, ‘el gran sueño’ de su vida, le preguntamos sobre cuál es el papel que ha de jugar una Primera Dama. Tras señalar que es ‘desempeñar un papel en el que pueda ayudar y compensar el Gobierno de su esposo’ (como sería la labor con la niñez, la labor con la vejez), afirmaba sin dudar que ha de ser ‘la gran bocina para que el Presidente se entere de cosas que otros no le dicen’. ¡Bien pensado!
Primeras Damas en La Hora del Té
La Hora del Té tenía lugar cada semana. Luego cada quincena. Hoy día continúa, pero sin fecha específica. Siendo ya Rosanna Rivera Caminero directora de Relaciones Públicas y de Revistas, y anfitriona de La Hora del Té, tuve la ocasión, aunque ya pensionada del Listín, pero como editora de Aldaba, de participar en ella con dos primeras damas en activo: Vivian Fernández de Torrijos, publicada el 11 de septiembre de 2006, y Margarita Cedeño (de Fernández), el 14 de septiembre de 2007.
La Primera Dama es ‘el lado humano’
En La Hora del Té con Vivian de Torrijos, preguntada sobre su papel como Primera Dama respondió: ‘Apoyo socialmente a la gestión y la administración del Presidente de la República. Es el lado humano, la cara humana de la administración que involucra otras cosas, como la parte económica y política. La figura de la Primera Dama llega a representar las voces de aquellos grupos que por mucho tiempo han estado olvidados y que de una u otra forma se identifican con la figura de la esposa del Presidente’.
El Despacho de la Primera Dama
A Margarita Cedeño no se le preguntó por el papel de la Primera Dama. Desde su Despacho realizó una prolífica labor a favor de los desfavorecidos y siempre se la vio como una mujer con dominio del ejercicio de la política. Su posterior papel en la política lo ha demostrado.