La Vida

UROLOGÍA PARA TODOS

Signos de alarma del cáncer de vejiga

Para poder tratar un tumor a tiempo es importante reconocer los síntomas. Es cierto que hay cánceres que nos sorprenden, pero el de vejiga es uno de los que más rápidamente se suelen diagnosticar, incluso en etapas muy tempranas, porque apenas una sola gota de sangre es capaz de teñir la orina, y el paciente generalmente visita a su médico, o visita la emergencia.

Para el diagnóstico

Gracias a la tecnología, tenemos a disposición la cistoscopia flexible digital con tecnología NBI, con la cual podemos diagnosticar hasta un 25-30 % más de cáncer de vejiga que con las cistoscopias que se realizan de manera rutinaria. Con esta, regularmente, se usa luz blanca, mientras que la que estamos usando tiene la tecnología con luz blanca y luz verde. Es algo más completo.

Poco frecuente

El cáncer de vejiga no es tan frecuente en urología como el cáncer de próstata, sin embargo, afecta tanto a hombres como a mujeres, pero más a hombres que a mujeres. Dentro de los factores que favorecen la aparición de este cáncer de vejiga está el tabaquismo, siendo este la principal causa. Otros factores que influyen son la exposición a determinados agentes químicos, como las antiguas lacas que se emplean en las peluquerías, en algunos casos la herencia de determinados genes predisponen a desarrollar cáncer de vejiga.

La cura según el caso

El pronóstico siempre va a depender del grado en que se diagnostique el cáncer. Si esta enfermedad se diagnostica cuando el tumor solo ocupa la capa superficial de la vejiga, es posible resecar, o sea, quitar todo el cáncer y la posible curación está alrededor del 80-90 %. Si, por el contrario, el tumor ha ido más profundo, la tasa de curación baja a un 50-60 %. Ya cuando el tumor se ha extendido a distancia y ha dado metástasis en otros órganos, entonces, desafortunadamente, las curaciones son muy escasas.

Tratamientos que pueden aplicarse

Las opciones de tratamiento son cirugía transuretral, la cirugía y la radioterapia, quimioterapia e inmunoterapia. La elección de cualquiera de estos tratamientos siempre va a depender de lo avanzada que esté la enfermedad. La duración de los tratamientos también dependerá de la respuesta del cáncer en cada caso. Ante la duda, visite a su urólogo.

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