La Vida

SENDEROS

Fe, esperanza y caridad

Ana Mirtha VargasSanto Domingo

El pasado miércoles se inició la Cuaresma, con el Miércoles de Ceniza, cuando los católicos recuerdan que “polvo eres y en polvo te convertirás”. Nos recuerda la transitoriedad de la vida. Cuaresma se deriva del latín quadragesima, número de días dedicados a realizar los aprestos de lugar para celebrar la Pascua de Resurrección, aluden al Misterio de Jesús en el desierto. Como toda fecha importante, se elige tomando el tiempo de la naturaleza. Luego de la entrada del sol en Aries, equinoccio de primavera del hemisferio norte, el próximo domingo después de la luna llena siguiente se efectúa la Pascua de Resurrección. Este tiempo es más que vacaciones de playa y montaña, deliciosas habichuelas con dulce, atabales y fiestas. Es un tiempo de recogimiento, fe, esperanza y caridad. Nos preparamos para la resurrección del Cristo en nosotros. ¿Cómo podemos hacer que este tiempo sea de elevación espiritual? En verdad, la praxis del misticismo es un asunto de los 365 días del año. Este tiempo es solo una renovación interior que sugiere revisar cómo anda nuestra relación con el Cristo en nosotros y con cada una de las personas que encontramos a nuestro paso. Que Cristo sea en nuestras vidas siempre.