TRIBUNA ABIERTA

¿Todos podemos ser emprendedores?

César Cordero

César Cordero

¿Puedo ser un emprendedor, en tiempos difíciles y de crisis? Es una pregunta que muchos se hacen, y la respuesta es un sí rotundo. Todos podemos ser emprendedores, el detalle es que no todos estamos dispuestos a pagar el precio y caemos en la trampa de querer serlo en base a la idea, mal orientada, que se nos ha vendido al respecto.

Lo primero es definir de manera correcta este concepto que, desde mi punto de vista, no es más que un estilo de vida, una cuestión de actitud y aptitud. Se deben combinar elementos de nuestra persona con elementos de conocimientos sobre lo que se quiere emprender.

Ser emprendedor es saber observar bien su entorno para encontrar oportunidades y soluciones innovadoras a demandas y/o problemas que otros no ven o no han sabido abordar. El emprendedor es quien, a partir de una idea en principio innovadora (hoy día no necesariamente es así), trabaja para sacar adelante por sus propios medios un proyecto en el que cree apasionadamente, busca la manera de materializarlo y asume los riesgos y consecuencias que esto significa. Se hace común pensar que el emprendedor está vinculado solo a la creación y desarrollo de negocios y persiguen solo ganar dinero, pero no es así, pues existen emprendedores sociales, culturales, políticos y más. También, si somos empleado de una empresa, podemos ser emprendedores dentro de ella, buscando siempre aportar soluciones con proyectos propios que van a dar más ideas y aportes innovadores para tu trabajo. La buena noticia es que en verdad todo el que quiera ser emprendedor puede serlo, hoy vivimos en un mundo de oportunidades y lo importante es considerar los siguientes elementos para poder emprender y hacerlo con éxito.

Vender nuestras ideas

Desde el momento que decidimos emprender en cualquier área, vamos a necesitar vender nuestras ideas, necesitaremos también obtener colaboración y un equipo de personas que asuman como parte suya un proyecto que nace con el emprendedor y la base para poder lograr todo esto, son las relaciones humanas, que como bien he podido validar en más de 25 años de experiencia son lo que marcan en gran parte el éxito en la vida de todo emprendedor, aquí una lista resumida de los demás elementos:

Poder de observación

Las personas emprendedoras son tremendamente curiosas y reflexivas, les gusta saber y aprender, sobre todo de los errores; de los propios y de los ajenos. Crean una visión profesional y personal y tienen claro hacia dónde van y cuáles son los caminos a seguir; además, no tendrán inconveniente en variarlos sobre la marcha si es necesario, le ponen pasión a todo cuanto hacen, lo hacen con una contagiable pasión, lo cual estimula también a que las personas que les siguen y las que les venden sus ideas.

Tienen coherencia y honestidad en sus principios y sus actos se caracterizan por ser apegados a principios y valores con respeto a los demás, muestran asertividad en su estilo de comunicación que debe de ser empático, agradable, claro, directo y convincente mediante el refuerzo positivo, siempre se están moviendo con acción.

Los emprendedores son hacedores; pasan a la acción sin dar demasiadas vueltas y hacen que las cosas pasen. No temen al fracaso, pues el fracaso es aprendizaje y para ellos un activo.

El emprendedor debe tener confiabilidad, esto es ganarse la confianza de otros (incluso posibles inversores), por esto los anteriores elementos, unidos a las habilidades personales (actitud correcta) más las capacidades técnicas (aptitudes) de estas personas, son las que hacen que se traduzca en personas emprendedoras.

Finalmente, puedo decir que, ser emprendedor requiere que nos hagamos líderes de nosotros mismos y que tomemos un liderazgo efectivo ante los demás y debemos incluir una fórmula que he desarrollado a través de los años, apoyando y entrenando a miles de personas, esto es: incorporar a nuestros proyectos de ser emprendedor la fórmula de las cuatro P (4P). 1. Planificación + 2. Prudencia + 3. Perseverancia + 4. Paciencia.

_________ El autor es director de Dale Carnegie Training para República Dominicana

Tags relacionados