Navidad en las alturas: Guía para un viaje a las montañas en las fiestas

AL LLEGAR LAS FESTIVIDADES DE NAVIDAD, MUCHOS TIENEN EN MENTE PASAR UN POCO MÁS DE TIEMPO EN FAMILIA Y ALEJADOS DEL BULLICIO PROPIO DE LA ÉPOCA, PLANES PARA LOS CUALES CIERTAS OPCIONES EN LA MONTAÑA SON PERFECTAS PARA LOGRAR LA TRANQUILIDAD DESEADA, RODEADOS DE NATURALEZA Y, POR QUÉ NO, UNA SENSACIÓN TÉRMICA LO SUFICIENTEMENTE BAJA PARA DISFRUTAR DE FOGATAS, MANTAS COMPARTIDAS, UN RICO CHOCOLATE Y ABRAZOS PROLONGADOS MUCHO MÁS A GUSTO.

El hecho de que sean vacaciones en la montaña no debería ser motivo de estrés, pues la finalidad es pasarla bien y hacer de esa Navidad la mejor para cada miembro de la familia. Antes que nada, identificar qué exactamente es lo que se pretende lograr resulta ser de suma importancia para asegurar, en gran medida, el éxito de la escapada familiar. Aquí te mostramos algunos puntos a tomar en cuenta para evitar perder la cabeza si las Navidades en la montaña están en agenda:

Identificar las preferencias Nunca será igual planear unas vacaciones a la montaña con y sin nieve. En ese sentido, es preciso identificar si la mayoría de quienes van estarán a gusto con todo lo que implica una u otra será esencial. Para quienes viven en el trópico, ir por primera vez a pasar tiempo expuestos a muy bajas temperaturas puede ser traumatizante, aún con calefacción. Por eso, saber preferencias y realidades es superimportante. Esto incluye saber qué quisieran hacer quienes irán para así adecuarse mejor.

Hacer un plan adaptado al lugar Una buena planificación es la base de todas buenas vacaciones. Hay quienes planean primero qué hacer, para luego elegir a dónde irán a hacerlo. Otros prefieren buscar antes el lugar para ver qué se puede hacer allí. Un método útil es hacerlo a la par. Y es que, si la mayoría quiere realizar ciertas actividades, lo recomendable es identificar dónde hacerlo, adaptándolo a las otras que sean propias del lugar, para así agregar un poco de dinamismo. Además, el plan deberá incluir contactos de seguridad, qué evitar, probabilidades de lluvia, en fin, todo lo que pueda representar una preocupación en algún momento. Nunca dejar nada al "allá sabremos".

Seleccionar el tipo de cabaña Como se trata de una época con temperaturas inferiores a lo acostumbrado, lo preferible es que en la cabaña elegida haya chimenea o calefacción, suficientes mantas para el frío, agua caliente todo el tiempo y WiFi, dependiendo de las preferencias. El plan es que el lugar tenga lo suficiente para cargar lo menos posible y no necesitar asuntos de comodidad que no puedan tenerse, pues una vez se esté allí, lo que menos se querrá es interrumpir para salir lejos a buscar faltantes, ni sentirse incómodo porque el sitio carezca del confort esperado o deseado. Aunque parezca obvio, es uno de los elementos que más arruinan momentos.

Listar lo que se llevará Este punto siempre dependerá del destino que se haya elegido, como el tipo de cabaña, monte y clima. Sin embargo, como de cualquier forma será en la montaña, hay ciertos elementos que no deben faltar: repelente, manta, gorros de frío, bufanda, lista de reproducción preseleccionada, juegos familiares, crema humectante, botas o calzado cálido, humectante labial, abrigos, linternas, GPS y antialérgico. Si el lugar escogido queda muy alejado de supermercados, lo ideal es llevar todo lo que se considere que pueda necesitarse, como alimentos y kit de primeros auxilios.

Tomar en cuenta los detalles Hay elementos que pueden hacer de las vacaciones, más que un momento de diversión, una fuente de estrés. Por eso, saber si el lugar tiene buena cobertura telefónica y de internet es esencial, y más si se necesitará por el asunto de una emergencia o pendientes que resolver. Lo mismo con los tipos de insectos que son propios del lugar, ya que puede que algún miembro de la familia sea alérgico a alguno de ellos.

Si habrá nieve En caso de que la montaña planeada esté en un lugar donde caiga nieve, ciertos puntos son vitales. Para quienes no están acostumbrados, exponerse a tan bajas temperaturas puede causarles dolor de cabeza y articulaciones, así que se debería tomar en cuenta. Se necesitarán guantes, bufandas, abrigos y gorros diseñados para el tipo de clima. Como muy probablemente pasarán mucho más tiempo en el interior de la cabaña, elaborar una lista de quehaceres en conjunto hará la estancia más divertida. En cuento a las actividades en exteriores, prever la seguridad será vital, ya que es bueno saber de lagos congelados en los alrededores y demás situaciones que puedan darse dependiendo del lugar.

Sin complicaciones Si algo hay que tomar en cuenta es que, al final, es a vacacionar que saldrán. En ese sentido, simplificarse la vida deberá estar en primer orden. Esto implicará cargar solo lo esencial, asegurarse de que el lugar elegido sea el que se adapte a la mayoría, que las actividades sean sencillas, los alimentos sin complicaciones y la montaña la perfecta para lograr el efecto esperado, sea cual sea.

Tags relacionados