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Del "Fast fashion" al "Slow fashion"

"La moda sostenible no es una tendencia: es el futuro", es posiblemente una de las frases en las que se han inspirado los creadores que, con sus marcas, han innovado en el mundo de la moda, al optar por traer al mercado piezas ecológicas y elegantes que son hechas con materiales ecoamigables, con el fin de luchar contra los efectos nocivos del fast fashion en el ambiente.

Esta alternativa incluye una gran variedad de accesorios y prendas de vestir, entre las que hay bikinis, pantalones tobilleros y de tiro alto, monos, camisas y conjuntos que puedes agregar a tu clóset, sin importar si tienes un estilo minimalista o te gusta ser más creativa al momento de vestirte.

Diversas firmas, teniendo como base las "Tres R" (Reducir, Reciclar y Reutilizar), se han abierto paso a un futuro de moda sostenible, fabricando sus colecciones con técnicas naturales y materiales, como algodón orgánico, poliéster reciclado y scraps de fibras naturales, llegando a evolucionar el mundo de la moda con el slow fashion, concienciando a empresas tradicionales que se espera vayan transformando sus modelos de producción.

Todas las mencionadas usan materiales sustentables o tecnologías menos dañinas, cada una con su propia identidad y destacándose por los diseños que se llevan el protagonismo en la actualidad, mientras que la moda rápida tiene el papel antagónico en un planeta en el que la industria textil es la más contaminante de todas.

En la moda rápida se usan microfibras plásticas para hacer ropa sintética, que afecta negativamente al mar. Y es en este donde pueden ser usados los bañadores, salidas de baño y bikinis ecológicos de Ozeano Swimwear, un emprendimiento dominicano que confecciona sus propuestas con botellas plásticas recicladas.

Sin duda alguna, el empoderamiento de la moda ecológica no es solo responsabilidad de los productores, sino de todas las personas que aman la moda, por lo que tener un criterio social en el que se deje atrás el consumismo desenfrenado representa, además de un acto responsable, uno de amor al entorno. Consumir marcas que estén comprometidas con el cuidado del medio ambiente, que crean productos que duran más de una temporada, es un modo particular de aportar algo al planeta.

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