REALIDAD Y FANTASÍA

El polvo del Sahara

Avatar del Listín Diario
María Cristina de CaríasSanto Domingo, RD

El calor agobiador y aplastante se ha apoderado de nuestro país, todo debido al polvo del Sahara. Cuando le informé a Emma la causa del calor, sacudió la cabeza y me miró por debajo de los espejuelos, como hace cada vez que encuentra chocante algo. Quiso saber de qué Sahara venía ese polvo, pues no sabía que hubiera un lugar llamado así en el país. Le expliqué que se trata de un desierto en África, en donde no hay más que arena, no hay agua ni vegetación y el viento, leva la arena a las nubes y la empuja hasta llegar a nuestro país. Me dijo que yo estaba siendo víctima de algún cuentista porque ninguna arena puede viajar tan lejos. Me encogí de hombros y me dispuse a desayunar. Al rato mi morena cocinera se acercó para decirme que en la radio estaban hablando del tal polvo del Sahara. No tuvo más remedio que aceptar la intrusión del tal polvo en nuestro medio. Aproveché para advertirle que podía tener molestias en ojos y nariz y que lo mejor era permanecer bajo techo.

Luego la oí conversando muy animadamente con la trabajadora vecina sobre el desierto y el polvo invasor. Esta conversación se repitió por teléfono, mi factótum estaba fascinada con el fenómeno extranjero y quería participárselo a todas sus amistades. Pronto la conversación versó sobre los remedios para contrarrestar los efectos del polvo, siendo la mascarilla el principal medio de defensa. En fin, que vamos capeando el nefasto calor y la invasión sahariana, pidiéndole a Dios un buen aguacero para que despeje el ambiente.

Tags relacionados