CULINARIA
El casabe, identidad dominicana
El casabe, herencia taína arawaca, es un pan ácimo, crujiente, delgado y circular como una arepa hecho de harina de yuca o mandioca y sin levadura, que en sus inicios fue el alimento predilecto de las culturas indígenas. Este se asa en un budare, comal o a la plancha. Su producción y consumo se remonta a tiempos prehispánicos.
Es uno de los productos que generan más identidad para nosotros los dominicanos. No solo las características naturales de este tubérculo llaman la atención de chefs, cocineros y amantes de la cocina. La diversidad que brinda la yuca a la hora de prepararse es un argumento muy fuerte para que sea elegida como uno de los productos principales de nuestra cultura.
Es muy importante para los dominicanos, pues este alimento contiene una importante carga cultural en el ámbito nacional. Es tan importante que, durante los últimos años, el Ministerio de Cultura y la Asociación Dominicana de Antropólogos (Asodan) se encargaron de crear un proyecto denominado Ruta Cultural del Casabe, un homenaje que no solo se enfoca en este, sino en los miles de personas que trabajan en la producción de este producto.
La iniciativa
Ruta Cultural del Casabe surgió con la necesidad de incentivar a consumidores nacionales e internacionales a que visiten las zonas donde más se produce este alimento y se apoye a estas comunidades de productores de yuca y así generar una economía circular.
Esta travesía sale desde el municipio de Monción, pasa por la provincia de Santiago Rodríguez y termina en la Cordillera Central, cerquita del “aposento de Dios”.
Hoy por hoy, con el tema de la ingesta saludable y de la intolerancia al gluten, el casabe es una excelente opción. El hecho de que sea un producto 100 % natural que aporta hidratos de carbono en abundancia permite que sea un alimento que brinda la energía. El casabe tiene 9 % de fibra. Pero lo más importante es su calidad, sabor, diversidad y que es una de las elaboraciones más ancestrales que tenemos los dominicanos.
Me encantaría que probaras esta delicia y que seas vocero de la cultura gastronómica de mi país para seguirla proyectando y apoyando.
Elaboración
Su elaboración es muy simple: solo debemos rallar la yuca con un microplane, luego sacamos el almidón con una gasa o paño de algodón y ponemos en una plancha, podemos saborizarlo con lo que queramos, ya que es muy noble, y darle la forma de nuestra preferencia. Me encanta ponerle queso, macadamias, cilantro, maní y coco.