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El polémico y extravagante rey de Tailandia

El rey de Tailandia Maha Vajiralongkorn Bodindradebayavarangkun subido a un palanquin es transportado a hombros de sus súbditos DIEGO AZUBEL

En los últimos meses muchas han sido las veces en que decenas de miles de personas se han manifestado en Tailandia para demandar un modelo democrático en el país. Al frente de las protestas están mujeres y hombres jóvenes que plantan cara a una monarquía protegida desde todos los ámbitos del poder y aún defendida por parte de la población.

La corona está siendo cuestionada por parte de generaciones jóvenes y la actitud y comportamiento del rey, Maha Vajiralongkorn, conocido como Rama X, no ayudan a mejorar la imagen de la institución. Todo lo contrario.

Rama X fue proclamado rey el uno de diciembre de 2016, a los 64 años, tras la muerte de su padre, Bhumibol Adulyadej, fallecido con 88 años en octubre del mismo año.

La coronación oficial se celebró en la primavera de 2019. Ya siendo príncipe, muchos miraban con recelo sus gustos, sus extravagancias, su desmesurada riqueza, su trato hacia las mujeres y su gusto por estar más tiempo fuera del país que en él.

Una vez en el trono, las cosas no mejoraron y sus actos comenzaron a llenar portadas de los periódicos en medio mundo.

Hace años, el rey prohibió que se publicasen o se difundiesen imágenes suyas en las que aparece en vaqueros por debajo de la cintura y camisetas sin mangas, con escote y cortadas por debajo del pecho.

En esas fotografías, además de su aspecto, llamaron la atención la cantidad de tatuajes que tiene el monarca. Las críticas no llegaron por su indumentaria, sino por la censura de los documentos gráficos.

SUMISIÓN.

No es difícil encontrar imágenes del rey rodeado por sus súbditos tirados en el suelo. En una de las últimas ocasiones fue una instantánea que captaba un viaje en metro del monarca y su esposa, sentados en el asiento, y su séquito tumbado en el suelo. De esta manera, se deja claro que el rey está por encima de todos ellos.

Esa misma postura fue la que tuvo que asumir su actual esposa, Suthida Vajiralongkorn, exazafata de Thai Airways, en la ceremonia de coronación, en 2019, que se celebró pocos días después de que la pareja contrajera matrimonio casi por sorpresa.

Durante los eventos funerarios de su padre, en 2017, el rey se hizo acompañar de Suthida y de su anterior esposa, la tercera, madre del heredero de Rama X, un adolescente que vive en Alemania.

De esta tercera esposa, Srirasmi Suwadeee, se divorció en 2014. Su familia fue acusada de delitos de lesa majestad y ella se vio involucrada. La separaron de su hijo y la desterraron. En la actualidad, permanece en arresto domiciliario.

Recientemente han aparecido en una red social imágenes de Suwadee, en las que aparece con una túnica malva, la cabeza rapada y a la que acompaña un texto en el que dice que no puede salir y se distrae con la jardinería.

El día que cumplió 67 años, con su actual esposa sentada a su izquierda, y tras tres meses de matrimonio con ella, el rey nombró a Sineenat Wongvajirapkadi, de 34 años, concubina real.

Ella también pasó el trago postrada en el suelo, a los pies del monarca. De esta manera, Rama X reinstauró oficialmente la poligamia en la familia real al rescatar una figura en desuso desde 1921.

Antes de que llegase el invierno de 2019, Sineenat fue repudiada. La corona la acusó de deslealtad y desobediencia y el rey le retiró todos los títulos que le había otorgado anteriormente.

Pero la historia no acaba ahí: casi un año después, en septiembre de 2020, el rey ordenó que saliese del lugar en el que estaba recluida y la incorporó a su harén en Alemania.

Sí, el rey tiene un harén en el país europeo. Durante uno de los puntos más altos de la pandemia de covid-19, Rama X dejó Tailandia para desplazarse a Alemania. Allí alquiló toda una planta de un hotel de lujo y se confinó con el grupo.

El rey se rodea de quién quiere y otorga títulos y cargos militares a placer entre quienes forman su corte. Incluso si no es humano.

Rama X tuvo un perro, un caniche blanco al que llamaba Foofoo y al que quería mucho. Tanto que, según diversos medios, lo nombró mariscal jefe del aire cuando todavía era príncipe.

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