"Tenemos un desafío que enfrentar ylo haremos con mucha fe y creatividad"

“Queremos que nuestros hijos amén a Dios y al prójimo, que vivan vidas íntegras y que tengan salud. Que cumplan el propósito individual por el cual"

Cada matrimonio en estos días, sin importar los años de casados, los hijos que tengan y su edad, tienen desafíos antes el arduo camino de la crianza, pero cómo dicen los esposos Stephanie Gómez y Alberto Reyes en estos momentos tan vulnerables para todos, ha sido un reto, especialmente porque sus hijos están muy pequeños, pero la clave es que lo han asumido con mucha creatividad.

Son los padres de Daniel Alberto, de 4 años y David Andrés, de un año y medio y, pese a todo, está muy optimista de sus sueños como padres y formadores de una familia para bien de la sociedad.

Esta pareja cumplió siete años de casados en este mes y su deseo es: “Queremos que nuestros hijos amén a Dios y al prójimo, que vivan vidas íntegras y que tengan salud. Que cumplan el propósito individual por el cual Dios los creo”, expresan. Este fin de año es inusual para todas las familias del mundo por la pandemia que se está viviendo, pero esto no debe minimizar la fe de un mañana mejor.

TIEMPO DE NAVIDAD

Lo más importante en este tiempo de Navidad es pasar tiempo en familia. Sabemos que este fin de año. Es un buen momento no para recordar lo Difícil del año, sino para atesorar cosas que uno daba por sentado; como poder reunirse con amigos, ir a la iglesia y abrazar a las personas, recibir personas en casa, etc.

Mensaje positivo

Que las malas experiencias no solo son fracasos si no aprendemos de ellas.

Que la experiencia mundial que ha traído este año sirva para recordarnos que es lo verdaderamente importante.

Este año cambió todo, pero lo único que no cambia ni cambiará jamás es Cristo.

Que construyan sus familias y sus vidas en La Roca inconmovible: Cristo. Si tienes a Jesús pueden venir las tormentas y la casa no se cae.

Esta pareja cumplió siete años de casados en este mes y sus expectativas para este 2021 están a la espera de lo que Dios va a hacer. Lo mejor está por venir.