En pandemia: Salud a través de los alimentos orgánicos

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Gabriela HungríaSanto Domingo

Desde que co­menzó la pandemia por el Co­vid-19, uno de los puntos más impor­tantes que destacaron los médicos fue el reforzamien­to de la salud. Se ha hecho alusión a lo necesaria que es una alimentación saludable que favorezca el aumento en la defensa.

Ante esta realidad, las sugerencias en torno a qué comer para lograr estar fuertes para enfrentar los embates del coronavirus, si llega a afectar, no se han hecho esperar. Que hay que consumir esto, no que es aquello, en fin, muchos dile­mas. Lo cierto es que, se ha dejado de lado lo importan­te que es consumir produc­tos orgánicos para obtener bienestar a través de una buena alimentación. LISTÍN DIARIO se ha in­teresado por conocer sobrelos beneficios de este tipode alimento, de manera es­pecial, el de las carnes. Paraabordar el tema se en­trevistó a la nutricionis­ta Claudia Jiméneza y a los hermanos AnabellaDe Castro de Santoni y Enri­que De Castro, quienes tie­nen vasta experiencia en elárea.

Desde su experiencia cuentan que la carne orgáni­ca proveniente de animales de pastoreo que no poseen hormonas ni antibióticos. “Es la que proporciona una comida saludable, natural y con un mejor sabor. Todo en favor del organismo”. Coin­ciden en decir.

Su parecer encuentra corroboración en la nu­tricionista Claudia Jimé­nez, quien además añade que, la carne orgánica ma­yores niveles de vitami­nas y minerales como cal­cio, magnesio y potasio. “Que consumamos este ti­po de producto durante es­tos momentos de crisis, es de suma importancia, pues definitivamente, mientras mejor preparados o refor­zados estemos, más leves pueden ser los síntomas de un virus como el Covid, en caso de que llegue a infec­tarnos.

La especialista comen­ta que, el hecho de que los alimentos orgánicos no tengan químicos ni ferti­lizantes, y que en caso de las carnes, no se les ponga hormonas ni antibiótico da una idea de cuán beneficio­sos son para salud, sobre todo en estos momentos en los que más que nunca hay que buscar todos los meca­nismos necesarios para po­seer bienestar.

La producción

Desde el punto de vista de la producción y cocción de las carnes orgánicas, Ana­bella De Castro de Santo­ni y Enrique De Castro, de Carnes&co, comentan que es un trabajo arduo y de en­trega. “Desde finales del si­glo XIX, en El Seibo, nuestra familia inició con su prime­ra finca, la crianza de gana­do para producir carnes y leche. Nuestro padre, Enri­que De Castro, luego de es­tudiar en Europa, llegó al país con los conocimientos adquiridos sobre las distin­tas razas de ganado y co­menzó a mezclarlas con las que se dan en el trópico, que son resistentes a nuestro cli­ma. Hoy en día, mi herma­no está tratando de crear un hibrido, usando el Cebú, un bovino originario de Asia, uno de los más tropicales, y a ese añadirle, Angus, ga­nado de Escocia, para crear esa terneza. Otra opción es usar la raza del ganado Se­nepol, originaria de la is­la caribeña de Saint Croix para lograr resultados óp­timos”, dice De Castro de Santoni.

Resalta que todo esto lo hacen porque tienen el in­terés de que los dominica­nos se dejen contagiar del sabor y el bienestar de las carnes orgánicas. “Nos em­peñamos en que cuando te comas la carne sepas de dónde viene, cómo creció, cómo fue tratada, y al criar con yerba hace que la sos­tenibilidad sea más efecti­va. Así contribuimos al bien­estar de los campesinos, a que la tierra no se seque y, sobre todo, a que la pobla­ción consuma una carne que, más que un alimento te hace vivir una experiencia”, sostiene Enrique De Castro.

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