Testimonios de ‘influencers’: Dos figuras cuentan su historia de depresión
En América Latina se estima que 21 millones de personas sufren depresión. En República Dominicana la prevalencia es de 4.7%.
La depresión es definida por expertos como una enfermedad o trastorno mental que lleva a las personas a vivir en un mundo en el que la tristeza, decaimiento, pérdida de interés por todo y la disminución de las funciones psíquicas son sus mejores aliadas, algo que puede ser muy dañino para quienes la padecen.
Este es un tema con mucho tabú, quizás por temor al qué dirán los demás. Sin embargo, los conocedores del tema recomiendan hablar del problema en vez de callar para así evitar complicaciones mayores.
Este año al celebrarse el Día Mundial de la Salud Mental, dos influenciadoras hicieron caso a este llamado, dejaron de lado las barreras del tabú y se atrevieron a hablar públicamente de su depresión.
Erika de La Vega, presentadora de televisión y locutora venezolana, junto a la bloguera de moda colombiana, Camila Zuluaga tras reconocer que tuvieron depresión decidieron compartir su experiencia públicamente para hacer visible esta enfermedad y motivar a que otras personas para que reconozcan los síntomas busquen la ayuda de un profesional a tiempo.
Las jóvenes dejaron al descubierto sus respectivas vivencias y explicaron por qué para ellas es clave derribar la barrera que impide hablar de una enfermedad que impacta a más de 300 millones de personas en el mundo y al 5% de la población en América Latina.
En apoyo Motivados por cambiar esta percepción que tiene la sociedad de callar en vez de hablar, Janssen, Compañías Farmacéuticas de Johnson & Johnson, convocó a periodistas de la región a un webinar para conocer la historia de Zuluaga y Vega.
“Mi manager y yo no queríamos decirles a las marcas con las que trabajo ni a mis seguidores que yo tenía depresión, y mucho menos que estaba en una clínica psiquiátrica. Sin embargo, decidí hablarlo públicamente porque entendí que mi historia podía ayudar a otras personas con esta enfermedad a buscar ayuda profesional como lo hice yo”, explicó Camila Zuluaga.
Durante todo un año estuve sintiéndome muy cansada, desganada, con ganas de dormir todo el tiempo, pero yo se lo atribuía al trabajo, a la obra de teatro que tenía un horario intenso, pero luego me atreví a comentárselo a una amiga, y ella fue la que me aconsejó ir a consultar a un especialista”, cuenta Erika de la Vega. Para mí fue clave reconocerlo y tratarlo, confiesa.
A tomar en cuenta Cuando una persona con una depresión mayor no responde a dos líneas de tratamiento o más, en dosis, tiempo y cumplimiento adecuado se considera que tiene depresión resistente al tratamiento (DRT), según datos ofrecidos por Leandro Aldunate, director de asuntos médicos, Neurociencias, en Janssen Latinoamérica.
CLAVES Conteo Según afirmaciones del doctor, Gerardo García Bonetto, médico psiquiatra e investigador de uno de los centros donde se hizo el análisis, los resultados del estudio epidemiológico TRAL (Depresión Resistente al Tratamiento en América Latina), realizado con el apoyo de Janssen en la región, mostró que el 29.1% de los pacientes con depresión mayor de los centros clínicos estudiados padecían DRT”.