Conductores de funerarias: El virus ha cambiado su uniforme

La presencia del Covid-19 en país y en el mundo, ha trastocado la cotidianidad de la sociedad. Hasta para honrar a los seres queridos con una despedida digna y cálida se ha interpuesto la pandemia. Es su responsa­bilidad que ahora haya que buscar alternativas de pro­tección para quienes les lle­van a su última morada.

Las funerarias han tenido que tomar cartas en el asun­to porque al tiempo de brin­dar el servicio, deben cuidar a su personal. De ahí que, han recurrido a dotar de una indumentaria especial a su personal para que se haga el trabajo sin ningún riesgo de contagiarse.

En la Funeraria Blandino, por ejemplo, han dispuesto no sólo de trajes especiales para llevar al cementerio a los difuntos que murieron por Covid.19, sino también de ambulancias fúnebres ideales para tales fines.

Desde una vestimenta para protección de quími­cos, mascarillas de alta re­sistencia hasta lentes contra vapores orgánicos y gases ácidos usan quienes deben realizar esta tarea.

Sin embargo, en la refe­rida funeraria, dejan saber que los carros fúnebres nor­males siguen utilizándose para llevar al camposanto a quienes han fallecido por otras causas que no sea co­ronavirus. Y, si la familia lo requiere para un familiar que haya muerto por Co­vid, entonces en este caso el chofer debe llevar el traje especial.

Herramientas de protección Desde que se agudizó la si­tuación en el país, en la Blandino se determinó el uso de una segura indu­mentaria para sus conduc­tores, así como de todas las herramientas y produc­tos necesarios para evitar el contagio de su personal y de sus clientes.

Trajes amarillos: Kleenguard A70 protección contra químicos bajo pre­sión.

Trajes blanco: Trajes de protección desechable.

Mascarillas: Respirador de silicón 750003M, resis­tentes a vapores orgánicos y gases ácidos.

Lentes de protección: Clear 99 por ciento UVA.